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Las empresas en Chile se preparan para celebrar Fiestas Patrias con convivencias laborales la próxima semana, incluyendo comida, música y alcohol. Y si bien se trata de ofrecer un espacio más "distendido" para compartir con los demás, se puede convertir en un dolor de cabeza e incluso una vergüenza en caso de que la combinación de música, diversión e incluso alcohol termina en los actos más embarazosos e incómodos posibles. Por ello, se aconseja mantener una conducta adecuada, evitar temas conflictivos y moderar el consumo de alcohol, sugerencia que aplica también para el baile -en caso de que lo hubiera-. Siempre en este tipo de fiestas hay que entender que son de "empresa", por lo que el contexto profesional sigue presente. En caso de haber incurrido en problemas, lo recomendable es buscar ayuda directamente con jefaturas y líderes, además de personal de recursos humanos, para así lograr enmendar lo ocurrido.

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La próxima semana -específicamente lunes o martes, en la previa a los feriados- muchas empresas y lugares de trabajo se tomarán un tiempo para realizar alguna convivencia o celebración con motivo de las Fiestas Patrias.

Comida, música, juegos, conversaciones más distendidas e, incluso, algunas copas de alcohol serán protagonistas de ese momento con los compañeros, los trabajadores de otras áreas y las jefaturas.

Pero lo que debería ser un momento entretenido también podría convertirse en una vergüenza para algunos. Y lo peor: tener que volver a las labores después de sentirse arrepentido por alguna conducta.

Lo primero a tener en cuenta es que ya sea por Fiestas Patrias, aniversarios o fin de año, una fiesta de la empresa siempre tiene “apellido”: es “de la empresa”. No es una junta con amigos en casa ni en un lugar a convenir.

Por lo tanto, los parámetros de conducta deben ajustarse a lo anterior, más todavía cuando hay alcohol.

Reglas básicas para no quedar en vergüenza en una celebración de la empresa

1. Ser “natural y puntual”

“Si se trata de empresas jerarquizadas, hay que mantener el respeto por los jefes, pero con naturalidad. Si es una empresa cuya cultura es de relaciones muy cercanas, hay que mantener esa cercanía, pero nunca pasarse”, publicó Expansión sobre las celebraciones del trabajo.

Y la puntualidad, como todo en la vida, también rige para la convivencia o celebración: es importante llegar a la hora.

2. Compartir, evitar “pelar” o hablar temas complejos

En las celebraciones de la empresa todos aprovechan de compartir con sus compañeros o los más cercanos del lugar, pero también es importante “saludar a todos” y aprovechar de conocer a los colaboradores con los que no se tiene interacción.

En esa línea, hay que intentar que los diálogos sean fluidos, espontáneos y no precisamente de trabajo (ya que se está en una instancia de relajo), remarcó Expansión.

“No hay que pasarse hablando de trabajo ni de las condiciones laborales. Y hay que evitar los temas conflictivos como política, fútbol o religión”, agregó el citado medio.

El alcohol en la celebración de la empresa por Fiestas Patrias

En el contexto de las Fiestas Patrias, de seguro el servicio ofrecerá alguna copa de vino, chicha, cerveza o “terremoto”.

Y ahí es donde se deben tomar precauciones y también ser solidario: lo ideal es evitar beber más de dos copas para evitar pasar una vergüenza o arruinar el ambiente; y también ser buen compañero y alertar a aquel que ya tomó algo más de la cuota.

Rodrigo Sáenz | Jesús Martínez | EFE

También se puede optar -para evitar cualquier conflicto- por las bebidas sin alcohol o el mote con huesillo, por ejemplo, y dejar los tragos para cuando se llegue a casa.

“El error más común es abusar del consumo de alcohol. Si pasamos los límites, lo más seguro es que uno termine bailando encima de la mesa. Todo irá muy bien ese día pero, cuando vuelvas el lunes a la oficina, no querrás mirar a nadie. Su consumo, por supuesto, debe ser siempre moderado”, señaló el sitio especializado en reclutamientos “Equipos y Talento”.

¿Y si hay baile?

Cuando comienzan a sonar canciones típicas de las celebraciones dieciocheras, para algunos le es imposible no salir a bailar y compartir aquél momento con otras personas.

Sin embargo, al ser celebraciones en un contexto de empresa, donde entre medio puede haber alcohol, la situación puede salirse de las manos y llevar a momentos embarazosos o que incluso, pueden volverse inapropiados.

Por ello, es que el contexto y la integridad personal del momento son importantes para decir (con la cabeza despejada y despierta) si es que conviene o no bailar con compañeros de trabajo en un contexto de celebración de empresa.

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El director de la carrera de Psicología de la Universidad de Las Américas (UDLA), Luis Pino, enfatizó en declaraciones a BioBioChile que estas actividades, si bien son celebraciones, “el contexto es laboral, ya que sigue siendo un entorno trabajo aunque sea por fuera de las dependencias de la organización”.

“Se debe mantener el profesionalismo en todo momento, tener claro los límites, roles y la autoridad, considerar el respeto a la diversidad de colaboradores, que actúan de manera más sobria o incluso manteniendo la formalidad del trabajo”, apunta Pino.

Ya la ’embarré’ en la celebración por Fiestas Patrias: ¿Qué hacer ahora?

Si llega el punto en que se descontroló la celebración de trabajo, y surgieron una serie de actos desafortunados, fuera de protocolo e incorrectos, donde varias personas resultaron incomodadas (o incluso peor), ¿Qué procede en este tipo de casos?

El académico UDLA sugiere “nunca actuar por iniciativa propia”, y recurrir a los líderes y jefaturas para buscar una instancia donde se pueda dialogar y retroalimentar las conductas inapropiadas.

También señala que se puede “consultar respecto a los lineamientos de este tipo de conductas a Recursos Humanos, ya que los trabajos y equipos tienen que ser espacios psicológicos seguros”.

“Si ocurre alguna situación inapropiada o que generó incomodidad, se puede pedir una reunión en donde expresar lo ocurrido y, dependiendo de las circunstancias o lo gravoso del asunto, buscar apoyo en instancias mediadoras, por ejemplo”, concluye Pino.