Elegir una sala cuna o jardín infantil es una tarea estresante para muchos padres. Está el desafío de buscar un recinto que, en general, se tiene que ajustar a ciertas condiciones del hogar (cercanía, por ejemplo). Sin embargo, eso no es lo único, porque luego viene el enfrentarse a precios que no son baratos.
La educación de los hijos muchas veces puede ser el ítem en el que más invierten las familias chilenas.
Y si bien se podría pensar que ese desembolso parte en la etapa escolar, puede comenzar antes para quienes necesitan servicios de salas cuna o jardín infantil.
En Chile, tanto Junji como Integra proporcionan educación parvularia gratuita a menores de entre 0 y 4 años. Sin embargo, se debe acceder a una vacante y en la postulación se analizan los antecedentes sociales y económicos de los interesados, conforme al Registro Social de Hogares.
Por tanto, no todas las familias califican para educar a sus hijos en esas entidades que tienen presencia a nivel nacional.
Primera preocupación: elegir y/o encontrar sala cuna o jardín infantil
Elegir una sala cuna o jardín infantil es una tarea estresante para muchos padres.
Primeramente, está el desafío de encontrar un recinto que se ajuste a ciertas necesidades (cercanía, facilidad de traslado, entre otros); y luego, combinar eso con lo que permita el presupuesto, ya que las mensualidades fluctúan entre $300 mil y casi $600 mil.
Francisco Droguett, director de marketing de Pluxee (empresa que entrega el servicio de administración del beneficio de salas cuna), comentó que “dejar a los hijos a cargo de personas desconocidas puede causar estrés y angustia en los padres y madres”.
Dada esa preocupación -respecto al lugar dónde dejar a los niños- las medidas de seguridad son un factor relevante: el sondeo arrojó que el 55,77% cuenta con circuito cerrado de cámaras, mientras que el 87,87% posee un protocolo de emergencia y el 49,32% tiene sala de emergencia.
Segunda preocupación: poder pagar la sala cuna o jardín infantil
Pluxee realizó un estudio sobre los valores de salas cuna y jardines infantiles para 2024. Para ello examinó 511 establecimientos en todo el país.
Lo anterior reveló que el costo mensual promedio a nivel nacional para este año es de $460.877 en el caso de las salas cunas y de $385.732 para los jardines infantiles.
Respecto a las matrículas, el promedio es de $378.478 y $314.388, respectivamente.
Estas cifras representan un incremento promedio de 4,5% entre 2023 y 2024 en ambos niveles.
De acuerdo al análisis, a nivel de salas cuna la región de Los Lagos presenta la mensualidad más elevada, con un promedio de $500.908. En contraste, Arica y Parinacota tiene la tarifa más baja, llegando a $340.000 de promedio.
En cuanto a las matrículas en las diversas áreas del país, la región de Ñuble lidera en costos, alcanzando un promedio de $471.667.
En el extremo opuesto, Aysén se destaca como la opción más asequible en este aspecto para 2024, con un promedio de $171.359.
Los más caras en la RM
El promedio de la mensualidad de las salas cunas en la región Metropolitana es de $405.691.
A nivel de comunas, las que tienen el valor más alto son Lo Barnechea ($571.500), seguida por Vitacura ($517.500).
Por otro lado, aquellas que poseen la mensualidad promedio más baja son Lo Prado ($360.000), Melipilla ($384.167) y Pedro Aguirre Cerda ($390.000).
Al comparar las matrículas, Lo Prado es la comuna con el promedio más bajo este año, con un valor de $200.000, mientras que la situación cambia para la comuna de Peñaflor, la cual se posiciona como la más alta con un costo de $500.000 en promedio.
Más cifras sobre las mensualidades
Otro análisis, elaborado por la empresa Edenred, registró que los precios de las salas cuna (se enfocó sólo en ese segmento) aumentaron un 6,8% para 2024 respecto al año anterior, lo que implica una variación anual mayor al IPC 2023, que fue de 3,9%.
El promedio del valor de la mensualidad, observado por regiones, pasó de $423.093 a $452.027. El aumento se registró en todas las regiones del país, pero tuvo un comportamiento distinto según la región, detalló este análisis.
Los Lagos fue la región donde se registró el mayor incremento, variando un 13,8%. Al contrario, donde menos aumentó fue en Magallanes, con 1,6%.
Algunas regiones, como Tarapacá y Metropolitana de Santiago, presentaron variaciones más moderadas, con aumentos del 2,5% y 6,8%, respectivamente.
Zoom en la región Metropolitana
En la región Metropolitana, donde el precio promedio es de $462.388 mensuales, con una variación de 6,8% interanual, se observan 16 comunas que están por sobre el promedio de la misma región.
Las comunas con las salas cunas más baratas (mensualidades) son:
Considerar al elegir un jardín infantil o sala cuna
Los padres, en general, buscan la comodidad de un establecimiento cercano al hogar, que se ajuste a su presupuesto familiar y, por otro, que entregue una educación de calidad en los primeros años de vida de los hijos.
De acuerdo a información contenida en el sitio web del Servicio Nacional del Consumidor (Sernac), al momento de tomar una decisión se debe tener en cuenta lo siguiente:
Sobre la infraestructura:
-Fijarse que las instalaciones del jardín o sala cuna estén limpias y ordenadas.
-Los baños deben estar debidamente aseados y con sus artefactos en buen estado. El uso de los baños debe ser exclusivo de los párvulos.
-Preferir establecimientos que tengan patio con árboles y juegos, pero que al mismo tiempo no revistan peligros.
-Fijarse que los pisos no tengan alfombras y que las paredes no tengan papel mural, ya que estos elementos acumulan suciedad e insectos.
-Las puertas de acceso deben abrirse hacia fuera, para facilitar el escape en caso de emergencia. Verificar las zonas de seguridad y los procedimientos en caso de urgencia.
-Las estructuras del piso, muros, techumbre e instalaciones deben estar en buen estado, que garanticen la seguridad de los niños.
-Preferir las instalaciones de un solo piso, ya que las escaleras son factores de riesgo de accidentes.
-Fijarse que las salas sean amplias, iluminadas y ventiladas.
-El mobiliario debe ser adecuado y en cantidad suficiente, sillas y mesas proporcionales al tamaño de los párvulos, materiales lavables y colchonetas y mudadores de cierta dimensión.
-Los juguetes y objetos didácticos deben ser seguros, no tóxicos, limpios, diversos, adecuados para cada edad y suficientes en cantidad.
Sobre las educadoras:
-Solicitar la acreditación profesional universitaria de la educadora de párvulos. No basta el uso de delantal o uniforme. El personal debe ser calificado y en cantidad adecuada para resguardar la atención educativa y el cuidado integral de los menores.
-Verificar el número de personas a cargo de los niños. Mientras más pequeño sea el niño más personal necesita.
-Conocer la permanencia del personal en la institución, ya que se relaciona directamente con el vínculo afectivo y la seguridad emocional del niño.
-Si el jardín o sala cuna otorga alimentación, la institución debe contar con una manipuladora de alimentos.
El Sernac también sugiere que los padres consulten lo que va a aprender su hijo, las rutinas, las actividades fijas y variables que se realizan durante el día, las áreas que se privilegian, la planificación pedagógica, la metodología de trabajo, los juegos con los que los niños aprenden y cómo puede participar la familia en ese proceso educativo.
En la Subsecretaría de Educación Parvularia, en tanto, los padres y apoderados pueden realizar consultas respecto a la regulación, fiscalización y normativa.
Por ejemplo, la Ley N° 20.832 establece que “todas las salas cunas y jardines infantiles que reciben aportes del Estado, deberán contar con el Reconocimiento Oficial, por lo que todo establecimiento educacional que entregue educación integral a niños/as entre 0 a 6 años, y que pretenda impetrar para su operación y funcionamiento aportes del Estado, debe obligatoriamente contar con dicha certificación”.
Esa certificación, cabe precisar, es voluntaria para los demás establecimientos del nivel (que no impetren recursos del Estado para su operación y funcionamiento), que podrán optar igualmente por la Autorización de Funcionamiento.
“El Reconocimiento Oficial es clave para la Educación Parvularia, pues permite asegurar un estándar mínimo de funcionamiento de los establecimientos del nivel, entregando además tranquilidad a las familias que confían en la educación pública”, indicó la Subsecretaría del área.
En este enlace se puede conocer el listado de salas cuna y jardines infantiles con Reconocimiento Oficial (actualizado a marzo de 2023).