Un análisis realizado por la empresa de alimentación Aramark en conjunto con Cadem, que consideró como muestra 1.000 entrevistas a nivel nacional, reveló que ante la inflación los chilenos admitieron estar comprando menos carnes rojas y evitando un hábito que tuvo un boom en plena pandemia: pedir comida por delivery.
La inflación, que en los últimos 12 meses lleva un acumulado de 13,7%, ha impactado fuertemente a los bolsillos de las familias, que han debido realizar ajustes en sus gastos.
Conforme al estudio, un 66% de los consultados declara que producto de esto ha dejado de consumir uno o más alimentos. El 50% señaló que ha optado por dejar o reducir considerablemente la compra de carnes rojas.
Sin embargo, la carne no es el único alimento que los chilenos han dejado de lado. Entre los más mencionados le siguen los pescados o mariscos (36%), pasteles, galletas o golosinas (30%); comida rápida (28%).
En cuanto a las bebidas, las gaseosas lideran el listado, con un 26%, seguido por las bebidas alcohólicas (22%) y la leche (19%).
Otros cambios de hábito dado el contexto económico que presentó la investigación son que un 66% dice pedir menos delivery para cuidar el bolsillo, un 50% que busca ahorrar dinero comprando alimentos más baratos o menos saludables y un 36% señala que ha tenido que endeudarse para poder comprar comida.
“El estudio mostró que uno de los principales motivos declarados para no llevar una alimentación saludable sigue siendo los precios de los alimentos (…). No es extraño entonces que los aspectos mayormente considerados a la hora de comprar alimentos sean la relación precio-calidad (87%), precio-cantidad (82%), y en general que sea barato (73%)”, explicó Roberto Izikson, gerente de Asuntos Públicos y Estudios de Cadem.
Alimentación saludable
El estudio Aramark-Cadem también reveló que un 65% de los encuestados señaló seguir algún tipo de dieta o patrón de alimentación, siendo el cuidado de la salud la razón principal. Los más populares son evitar la azúcar refinada (31%), la lactosa (25%) y comer alimentos con algo contenido proteico (24%).
Se analizaron también los cambios que en el último año han registrado las costumbres y parámetros que definen la alimentación saludable entre los chilenos.
Han disminuido las personas que consideran su dieta como “saludable”, pasando de un 46% en el 2021 a un 40% en el 2022. En contraste, crecen quienes la evalúan como “algo saludable” (43%,+ 4) y “poco o nada saludable” (17%, +2).
La base de la alimentación continúa siendo el pan, el té y café, el agua y los vegetales. Otros alimentos y bebidas que se consumen todas las semanas son arroz, fideos y papas, huevos, pollo o pavo, lácteos y leche.