Entre el 2020 y el 2022, el valor de 1 litro de aceite (vegetal o maravilla) pasó de los $1.700 aproximadamente, a más de $3.500 en ciertas zonas de Chile. El aumento de su valor se debe, entre otras cosas, al conflicto entre Rusia y Ucrania, sumado al fenómeno inflacionario general y las medidas contra cíclicas del Estado.
El precio del aceite, en Chile, superó los $3.000 el litro, un alza que refleja el fenómeno económico de la inflación que afecta a nuestro país y al mundo y que en febrero llegó al 7,8%, según información del Banco Central.
A través de redes sociales, los consumidores han hecho ver el notable avance del precio de este producto, que tuvo un alza de casi el 100% en los últimos 24 meses.
El aceite es un ingrediente casi esencial en la cocina. Su uso va desde la preparación de platos básicos (papas fritas, verduras, etc.), hasta la repostería y el pan.
El precio del aceite en Chile, paso de los $1.700 aproximadamente en 2020, a más de $3.000, incluso llegando a los $3.999, en abril del 2022.
— carolina riquelme (@carolinarique31) April 5, 2022
El aceite vegetal alcanzó un alza de casi un 70%, según la Oficina de Estudios y Políticas Agrarias (ODEPA). Mientras que el precio del aceite de maravilla subió hasta casi un 90%.
Carolina Erices, Ingeniera Comercial y académica de la Universidad de Valparaíso, afirmó al medio La Quinta Emprende, que el precio del aceite vegetal tuvo la mayor alza histórica en cuanto a su valor, de acuerdo a la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO).
Según a la profesional, las repercusiones del conflicto entre Rusia y Ucrania, serían responsables del aumento del precio del aceite en Chile. “El embargo del aceite de girasol, cuyos principales productores son Rusia y Ucrania, también han revalorizado el precio del aceite de oliva (vegetal)”, explicó.
Rusia prohibió la exportación de semillas de girasol desde el 1 de abril y fijó cuotas para la exportación del aceite de girasol y el salvado a partir del 15 de abril. Junto con Ucrania, representan más de la mitad del suministro mundial de aceite de girasol y un 30% del de trigo.
Por otro lado, Erices acotó que la pandemia del covid-19, la pérdida de mano de obra, el cierre de fronteras, y alza del valor del combustible, son una serie de factores que comenzaron a gestar un alza en los precios del aceite.
Por último, la adopción de medidas contra cíclicas, como paquetes de estímulos fiscales (bonos, ayudas, IFE, entre otros), traen aparejados efectos inflacionarios.