El Servicio Nacional del Consumidor (Sernac), ofició a 10 empresas que operan y venden máquinas de pago con tarjetas (o POS), con tal de saber si “cuentan con las características necesarias para no cobrar propina de manera automática o predeterminada”.
Se trata de un nuevo episodio de la arremetida del organismo contra la masificación del uso de la propia y cómo, en este contexto, se han conocido casos de aplicaciones donde este tipo de montos se “sugieren” de forma predeterminada y, finalmente, se cobran sin que en ocasiones los usuarios se den cuenta.
En esta ocasión, el Servicio ofició a Transbank-Webpay, Tuu, Sumup, Mercado Pago/Redelcom, Getnet, Compraquí, Klap, BCI Pagos, Kushki y Fudo para que en un plazo de 10 días hábiles administrativos, envíen algunos de los siguientes antecedentes.
Sernac pide detalles a máquinas POS por pago de propinas
Uno de ellos apunta a “si existe alguna manera de modificar la operación de las máquinas para poder garantizar dejar no predeterminado un monto de propina y que se garantice siempre (en los casos del comercio que esté habilitado para ello) sea voluntario para los clientes”.
También se les consultó si el responsable de la configuración inicial de los aparatos es la empresa o el establecimiento que los usa, para que en caso de que sea necesario, instruir cambios para que no se pueda habilitar esta opción en comercios donde no corresponda.
Según señalaron en un comunicado, esta solicitud de antecedentes se enmarca en la discusión de un proyecto de ley que busca limitar los tipos de locales donde se puede pedir propina.
“Así, al pedir esta información, se busca prever que estas limitaciones puedan llevarse a cabo en el proceso de compra a través de estas”, junto con garantizar que al avanzar en el pago, la propina no sea dejada por defecto.
En otro aspecto, el Sernac también pidió detalles respecto a mecanismos de inclusión para personas en situación de discapacidad visual o motriz al momento de pagar.
Por ello, solicitó a las empresas que informen “cómo dan garantías” a este tipo de personas, con la idea de que “a través de las mejoras que se puedan implementar en las máquinas de pago, se incluya una forma en la que el cliente o clienta pueda pagar sin necesidad de dictar su número de clave a un tercero y que puedan ejecutar el pago con mayor autonomía”.