Durante este mes, el Banco Santander fue víctima de una serie de ataques informáticos entre el 18 al 22 de octubre. Se trató de una modalidad de ataque DDoS o de “denegación de servicio”, donde se busca “recargar” el tráfico que llega a un sitio web con tal de “bajarlo” o afectar el normal funcionamiento del mismo.
En este contexto, y teniendo en consideración la gran cantidad de gente que se vio afectado por ello, es que la empresa decidió querellarse contra quienes resulten responsables de este ilícito.
Según la información consignada por La Segunda, los ataques fueron dirigidos a enlaces del banco y no directamente a los portales. Con ello, Santander señaló en su querella que los clientes “no lograron conectarse a los servicios de los canales de internet o aplicaciones del banco, impidiendo las transacciones” luego de los ataques que llegaron a extenderse por cuatro horas.
Banco Santander se querella tras ciberataque
En total, más de 321 mil usuarios se vieron afectados durante el sábado 19. En la querella, la firma perteneciente al banco de capitales españoles, sostiene que el ataque podría tener como objetivo la “afectación económica” por la posible imposición de multas; extorsión o incluso activismo.
Consultados al respecto, desde Banco Santander señalaron que en cuanto conocieron el hecho, se “adoptó todas las medidas necesarias para proteger en debida forma a los clientes”.
Además, la empresa señaló que se dio “aviso a la CMF, al Sernac y a los clientes para que estuvieran al tanto de lo ocurrido”.
“Como es política de Banco Santander, detectada la existencia del ilícito, se reunieron los antecedentes y se presentó la acción penal con el objeto de poder determinar la identidad de quienes han actuado en forma ilícita y se les aplique las sanciones que la ley establece”, concluyeron.