El consejero delegado de la tecnológica estadounidense Apple, Tim Cook, confirmó este martes que se encuentra en China por segunda vez este año en un momento en que la empresa busca apuntalar sus ventas en el gigante asiático.
El fabricante del iPhone sigue siendo popular entre los consumidores chinos, pero ha cedido terreno a sus rivales nacionales en los últimos años, a lo que hay que sumar la ralentización del crecimiento económico en China.
Cook indicó en su cuenta oficial de la red social Weibo, equivalente a X -censurado en China-, que se reunió hoy con estudiantes universitarios chinos que utilizan productos de Apple para impulsar prácticas agrícolas sostenibles.
En otro vídeo subido a su página oficial el lunes por la noche, Cook acompañó al fotógrafo de moda Chen Man en un paseo por la capital china: “Es genial estar de vuelta en Pekín”, escribió.
Tim Cook: el CEO de Apple vuelve a visitar China
La última vez que Cook visitó China fue en marzo de este año, cuando abrió una nueva tienda Apple en la ciudad de Shanghái (este) y asistió a un foro en la capital china junto con otros altos ejecutivos.
La ‘gran China’ (China continental, Hong Kong, Macao y Taiwán) es el tercer principal mercado para Apple detrás del continente americano y Europa.No obstante, la tecnológica afronta presiones bajistas en la segunda economía mundial, donde, según datos de la consultora Counterpoint Research, fue solo el sexto mayor vendedor de teléfonos inteligentes en el segundo trimestre, por debajo del tercer puesto que ocupó en el mismo período del año pasado.
El gigante tecnológico Apple reportó en agosto unas ganancias netas de US$79 mil millones en los nueve primeros meses de su ejercicio (no sigue el calendario natural), un 7% más interanual.
El mayor mercado de Apple sigue siendo el de las Américas, seguido por Europa, y en tercer lugar están China y alrededores, el único que ha reducido sus ventas en el trimestre (6%), frente a aumentos en Japón y el resto de Asia-Pacífico, según un comunicado de la tecnológica.
Cook se embarcó este año en una campaña para revertir la situación, anunciando la creación de un nuevo laboratorio de investigación y desarrollo (I+D) en la ciudad de Shenzhen (sureste) y la ampliación del que ya tiene la empresa en Shanghái o celebrando encuentros con importantes directivos como el fundador y presidente de BYD, el mayor vendedor mundial de vehículos eléctricos.