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La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) impuso a Booking una multa histórica de 413,24 millones de euros por abuso de posición de dominio en España en los últimos cinco años, al imponer cláusulas desequilibradas a los hoteles. Esta es la mayor multa que ha aplicado el organismo, indicando que las prácticas de Booking han perjudicado a hoteles y agencias de viajes en línea al favorecer a los hoteles con más reservas, impidiendo la competencia. La empresa recibió dos multas de 206,62 millones de euros cada una y se le impusieron obligaciones de comportamiento. Booking ha anunciado que recurrirá la decisión, argumentando que la ley de la UE es el foro adecuado para discutir estos temas a nivel europeo. Las denuncias contra Booking comenzaron en 2021 y la CNMC inició un expediente que confirmó el abuso de posición de dominio por parte de la plataforma neerlandesa.

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La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), el ente regulador español, ha impuesto una multa a Booking de $413,24 millones de euros por abuso de posición de dominio en los últimos cinco años porque sus cláusulas suponen un “desequilibrio inequitativo” en la relación comercial con los hoteles situados en España.

Esta se constituye como la mayor multa (o suma de multas) que ha impuesto el organismo en su historia.

Según informó Competencia, las prácticas abusivas han afectado a los hoteles en España y a otras agencias de viajes en línea que compiten con la plataforma, porque al posicionar mejor a los hoteles con más reservas en Booking.com ha impedido a otras agencias en línea entrar en el mercado o expandirse, añade la Comisión.

Regulador de España pone la multa más alta en su historia a Booking

La compañía ha cometido dos abusos de su posición de dominio desde, al menos, el 1 de enero de 2019 hasta ahora al imponer varias condiciones comerciales “no equitativas” a los hoteles situados en España que emplean sus servicios de intermediación de reservas y que supone restringir la competencia de otras agencias de viajes en línea que ofrecen los mismos servicios.

Por ello, le impone dos multas de $206,62 millones de euros cada una por las infracciones continuadas de abuso de posición de dominio por imponer estas condiciones no igualitarias y por la restricción de la competencia.

Además, le impone varias obligaciones de comportamiento para garantizar que ni las conductas que dieron lugar a las infracciones, ni otras que puedan producir un efecto equivalente, prosigan en el futuro.

La cuota de Booking en España ha oscilado durante el periodo investigado entre el 70% y el 90%.

Respuesta de la empresa

Mediante un comunicado, la plataforma con sede en Ámsterdam dijo que “no está de acuerdo” con la decisión “sin precedentes” del organismo español, por lo que recurrirá ante la justicia del país europeo.

La empresa considera que la Ley de Mercados Digitales de la UE “es el foro adecuado para discutir y evaluar estos temas”, porque permite acordar soluciones que se apliquen en toda Europa en lugar de país por país, “como está haciendo la CNMC”.

Además, señala que la decisión del regulador español adolece de una “falta de coherencia” para consumidores y socios de alojamiento en España y destaca que el éxito de su negocio se basa en una asociación “mutuamente beneficiosa y equilibrada” con casi 200 mil hoteles y alojamientos en España.

Antecedentes

En 2021, la Asociación Española de Directores de Hotel y la Asociación Empresarial Hotelera de Madrid denunciaron a la compañía por abusar de su posición de dominio.

En octubre de 2022, la CNMC inició un expediente sancionador, cuya instrucción acredita que la compañía con sede en Ámsterdam abusó de una posición de dominio al imponer condiciones comerciales no equitativas a los hoteles situados en España.

Concretamente se refiere a una cláusula de precios que impide a los hoteles ofertar habitaciones en sus propias webs por debajo del precio de la plataforma neerlandesa, que, además, se reserva el derecho a rebajar unilateralmente el precio de los establecimientos a través de la web o aplicación de Booking.

Además, Competencia critica que en caso de conflicto sobre las cláusulas de contratación, los establecimientos españoles no pueden acudir a los tribunales españoles y deben acudir a los de los Países Bajos, lo que les genera costes de litigación “inequitativos”.