“Que coman pasteles”, habría dicho la reina María Antonieta ante los campesinos que no tenían pan en el siglo XVIII, demostrando la indolencia de la aristocracia frente al hambre, uno de los principales factores tras la Revolución Francesa.
Y como la historia es cíclica, una polémica similar gatilló el CEO de la empresa Kellogg’s, Gary Pilnick, al sugerir que las familias pobres deberían comer cereal para la cena.
El ejecutivo hizo las declaraciones durante una entrevista con el conductor de la cadena CNBC, Carl Quintanilla.
“Debemos alcanzar al consumidor allí donde esté, así que estamos comenzando a publicitar el cereal como una alternativa para la cena, si piensas que el costo del cereal para una familia es mucho más asequible que cualquier otra cosa”, indicó.
Quintanilla, sorprendido, replicó: “Pero, esta idea de cenar cereales… ¿no podría tomarse a mal?”.
“No creemos eso. De hecho está siendo muy bien recibida, Carl. Cuando miramos nuestras cifras, vemos que el cereal ya es la opción número 1 para el desayuno, pero sucede que el 25% del consumo de cereal es fuera del desayuno, gran parte para la cena y también como snack. Así que esperamos que siga subiendo, sobre todo mientras el consumidor está bajo presión (económica)“, espetó
Las palabras de Pilnick provocó indignación en redes sociales, donde muchos usuarios apuntaron a la indiferencia de la visión de la compañía, más aún considerando que el precio de los cereales ha aumentado un 28% desde 2020, y la propia Kellogg’s ha subido sus precios en 12%, según informa CNN Business.
Otros mencionaron lo irónico del mensaje, proviniendo de un ejecutivo que recibe un sueldo superior a los 4 millones de dólares por año.