“Todo lo que pueda estar en las manos del sector privado va a estar en las manos del sector privado”, afirmó Milei, apuntando a las empresas estatales como YPF y los medios.

Los medios de comunicación públicos argentinos han mostrado preocupación y un completo rechazo a los planes del recién presidente electo, Javier Milei (La Libertad Avanza, LLA), quien confirmó que pretende privatizarlos.

“(Milei) demuestra un gran desconocimiento del rol que cumplen (los medios públicos) en la construcción democrática”, dice un comunicado conjunto firmado por la titular de Radio y Televisión Argentina (RTA), Rosario Lufrano; la directora de la agencia de noticias Télam, Bernarda Llorente; y la gerente general de Contenidos Públicos, Jésica Tritten; y suscrito por Radio Nacional y la TV Pública.

Así, en la misiva insisten en que “los medios públicos son esenciales para el fortalecimiento de la vida democrática, la libre expresión, la diversidad de voces y la construcción ciudadana”.

En ese sentido, han defendido la información “como un derecho y no como mercancía”, que se produce en base al “interés público y no por los estándares comerciales”, que trabajan en torno a la “pluralidad, la diversidad y la inclusión” y que su mandato está “establecido en las leyes vigentes”.

Además, los directivos han explicado que el rol de los medios públicos también sirve para “la soberanía informativa y cultural” y para “la difusión de Argentina hacia el mundo”. Han reafirmado su compromiso de cumplir con las buenas prácticas y a someterse a “la rendición de cuentas a la ciudadanía y a órganos de control”.

Previamente, Milei había reiterado sus planes para privatizar empresas públicas como la petrolera Yacimientos Petrolíferos Fiscales (YPF), la Televisión Pública, Radio Nacional y la agencia de noticias Télam “más por motivos simbólicos que presupuestarios”.

“Todo lo que pueda estar en las manos del sector privado va a estar en las manos del sector privado”, afirmó Milei en una entrevista con radio Mitre.

De acuerdo al medio Clarín, y en línea con lo anterior, el presidente electo no profundizó cuáles serían sus intenciones con Aerolíneas Argentinas.

Pero previamente declaró que el personal de la línea aérea es “muy calificado” y que el problema “radica en la contaminación política”.