Hasbro, famosa firma estadounidense y fabricante de juguetes como el Monopoly, Furby o Jenga, comunicó que dejará de operar en Argentina, sumándose así a la larga lista de empresas que por diversos motivos han determinado irse de esas tierras.
Conforme a lo indicado por el medio La Nación, Hasbro habría experimentado -al igual que otras compañías- dificultades para desenvolverse en el mercado argentino, en un contexto de elevada inflación, problemas cambiarios y de poder adquisitivo por parte de los consumidores.
“La Argentina, por su volumen de mercado, inconvenientes para importar y bajo presupuesto de la población para la compra de juguetes, no les rinde a esas mega corporaciones”, comentó al citado medio Daniel Dimare, director de marketing de la juguetería local Rasti y miembro de la Cámara Argentina del Juguete (CAIJ).
De momento, Hasbro no profundizó en las razones para retirarse de Argentina, pero en un Boletín Oficial confirmó la disolución anticipada de la sociedad (Hasbro Argentina SA).
Según El Economista, se habría visto afectada por “competencia desleal” y por “el ingreso al país de mercadería de contrabando” y los juguetes de imitación.
En medio de un complejo escenario económico, -que se arrastra desde hace años y que según los analistas y opositores se incrementó con la llegada de Alberto Fernández al poder-, han sido varias las empresas que han cerrado sus operaciones en Argentina.
En los últimos tres años, más de 30 multinacionales se fueron o achicaron sus negocios en el país.