La minera estatal Codelco solicitó los servicios de la empresa de reclutamiento “Egon Zehnder”: necesita hallar un profesional senior para la vacante que dejará André Sougarret.
El actual presidente ejecutivo de la empresa presentó su renuncia al cargo a menos de un año de haber asumido; y ello se hará efectiva el 31 de agosto.
Sougarret, tras su renuncia, explicó dificultades para conciliar sus responsabilidades laborales con otros aspectos de su vida.
“(…) No ha sido fácil conciliar las exigencias del cargo con el cuidado de las demás facetas que conforman la vida de un ser humano”, comentó el ingeniero en minas en una carta que envió a los trabajadores, en la cual les informó la decisión que había tomado.
“Roces” y “un nivel de chaqueteo demencial”
Pero también en torno a esta renuncia, se destaparon “roces” con Máximo Pacheco, presidente del directorio de Codelco. Fuentes aseguraron que su relación con Sougarret habría estado mostrando “desgastes”.
En el último tiempo, en tanto, Pacheco asumió el protagonismo mediático de la minera; y tomó las riendas de las negociaciones con los privados (SQM y Albemarle) en el marco de la Estrategia Nacional del Litio.
Y Diario Financiero agregó otro antecedente: “un nivel de chaqueteo demencial” entre los altos cargos de la cuprífera.
Ejecutivos indicaron privadamente al citado medio que Sougarret nunca pudo tener una relación del todo fluida con el comité ejecutivo de Codelco, desde donde hubo críticas a su gestión.
En su carta, además, Sougarret admitió otros detalles y autocuestionamientos. Redactó: “(…) permanentemente en el ejercicio de este cargo me he preguntado si dispongo de las habilidades, recursos, competencias y energía que la corporación necesita”.
Por último, en sus líneas reiteró que su renuncia la puso sobre la mesa con “la tranquilidad de haber entregado todo”, tanto en sus funciones como con su equipo de trabajo.
Sobre Sougarret, la estatal destacó que en su carrera profesional recibió importantes reconocimientos, entre ellos, el haber sido elegido como “Ingeniero del año” por el Colegio de Ingenieros de Chile en 2010; y el rol de líder que asumió cuando sucedió el accidente de la Mina San José y hubo que rescatar a los 33 mineros que quedaron atrapados a 700 metros de profundidad.