“Todas las empresas deben cumplir a cabalidad con la normativa”, indicó la directora ejecutiva del Consejo del Salmón por la situación de la firma china Australis, que se autodenunció ante la Superintendencia de Medio Ambiente (SMA) por la sobreproducción en sus plantas, acusando una estafa por parte del expropietario de la salmonera vendida en 2019
La investigación parte de una autodenuncia que hizo la salmonera Australis Seafoods por sobreproducción en 33 centros de cultivos ubicados entre las regiones de Aysén y Magallanes, hecho que data desde 2016, según detalló la propia empresa.
Actualmente se cursan 5 procesos sancionatorios contra 9 centros de cultivo, 8 de ellos situados en zonas protegidas de la Patagonia, por lo que arriesga una multa de 73 mil unidades tributarias anuales, es decir, 54 mil 700 millones de pesos aproximadamente, sin embargo esta cifra podría aumentar.
Desde Australis Seafoods, a través de un comunicado, indicaron que los actuales inversionista, Joyvio Group, fueron estafados por el dueño anterior, quien les vendió la empresa en 2019 asegurando que cumplía con la normativa ambiental.
Por esto anunciaron acciones civiles y judiciales contra quiénes resulten responsables de “la política sistemática de sobreproducción y ocultamiento”, además de los delitos relacionados a la adquisición de la empresa bajo supuestas falsas condiciones. Precisan que dichas acciones se perpetraron desde 2016 y significó una sobreproducción de más de 80 mil toneladas de salmón.
Así inició un arbitraje internacional donde solicitan la devolución del valor pagado por la empresa, es decir, USD 921 millones, más USD 300 millones por daños y perjuicios.
Reacción de Consejo Salmonero
La directora ejecutiva del Consejo del Salmón, Loreto Seguel, indicó que “el conflicto generado en la venta de Australis se deriva de una transacción entre dos privados cuya resolución depende de ellos. Desde el Consejo del Salmón confiamos en que opere la institucionalidad y el caso se resuelva pronto. Los valores y la confianza empresarial son vitales para el desarrollo sostenible de nuestro país y todos quienes somos parte de él”.
“Estamos conscientes de los desafíos que significan para la salmonicultura alcanzar las mejores prácticas productivas y, por esa razón, como gremio, estamos comprometidos y abocados en promoverlas en pos de un desarrollo sostenible en lo ambiental, social y económico, y en paralelo ser parte activa en la construcción de una virtuosa alianza público-privada que permita proyectar adecuadamente la industria”, complementó.
Para finalizar enfatizó que “acá no hay dos lecturas: todas las empresas deben cumplir a cabalidad con la normativa que rige sobre esta actividad tan relevante para la economía chilena, y en particular, para el sur de nuestro país”.