Antofagasta Minerals -área minera del Grupo Luksic- reportó que obtuvo una producción de 138.800 toneladas de cobre fino durante el primer trimestre del año, con un costo neto de caja de US$1,75 la libra, algo que si bien está en línea con las estimaciones del grupo significa una disminución en comparación con el periodo anterior.

“Como ya habíamos informado, esta disminución en la producción respecto al año anterior es el resultado de la prolongada sequía que vive la región de Coquimbo, donde se ubica Minera Los Pelambres; y de una baja en las leyes en la línea de sulfuros de Minera Centinela”, explicó Iván Arriagada, presidente ejecutivo de Antofagasta Minerals.

En el caso de Minera Los Pelambres, la compañía detalló a través de un comunicado que el proyecto Infraestructura Complementaria (INCO) alcanzó un 73% de avance. Con un costo de US$2.200 millones, considera la construcción de una planta desalinizadora, la que se pondrá en marcha durante el segundo semestre de 2022. De esta forma, podrá “normalizar su capacidad de producción incluso si las condiciones de sequía se extienden al resto del año”.

Sobre las menores leyes en Centinela, que afectan también la producción de oro y molibdeno, el plan minero considera que “se irán recuperando durante los próximos meses”.

“Por esta razón, el Grupo mantiene su meta de producción para el año de 660.000 – 690.000 toneladas de cobre, a un costo neto de caja de US$1,55 la libra”, dijo Iván Arriagada. Además, comentó que el Grupo conserva su expectativa de invertir US$1.900 millones durante este año.

En cuanto a los mercados mundiales, el ejecutivo indicó que “el cobre, oro y molibdeno registraron un buen desempeño durante el primer trimestre y esperamos que esto se mantenga, ya que el balance estructural de la oferta y la demanda se refleja en un mercado físico muy ajustado”.

A la vez, señaló que el Grupo Minero mantiene su enfoque en controlar los costos, cuidar la rentabilidad de sus inversiones y, sobre todo, resguardar la salud y seguridad de sus trabajadores, colaboradores y de las comunidades cercanas a sus operaciones y proyectos.

“Este primer trimestre ha sido muy desafiante, ya que tal como lo esperábamos estamos enfrentando condiciones que afectan nuestra producción. Sin embargo, son condiciones transitorias, las que estamos abordando gracias al trabajo y a las inversiones que ya estamos realizando y que siguen avanzando de acuerdo a nuestros planes”, concluyó Arriagada.