“Hoy el sueño termina”. De esta manera Peppermint Chile, la reconocida empresa de venta de anteojos de sol en stands de centros comerciales, comunicó el cierre de los módulos establecidos en distintos puntos del país.
Esta noticia cayó como un balde de agua fría para los trabajadores, no sólo porque quedaron sin trabajo, sino porque también denuncian que los dueños “desaparecieron” sin pagar las cotizaciones y sueldos correspondientes a agosto.
La situación quedó al descubierto luego que en los módulos dispuestos en los centros de comerciales, los trabajadores comenzaran a vender el stock remanente para reunir el dinero que salde sus propias remuneraciones.
Los afectados apuntan directamente a la responsabilidad del dueño de Peppermint, Mauro Aste, al gerente de ventas, Jaime Mesa, y contador de la empresa, Isidro González.
Mariel Barahona, una de las trabajadoras, relató a BioBioChile que desde hace un tiempo que la empresa estaba presentado problemas de financiamiento: no tenían productos, boletas y sus cotizaciones estaban declaradas pero impagas.
Sin embargo, el dueño había prometido restablecer la situación, lo cual aseguran no ocurrió.
“Por contrato a nosotros nos debían haber pagado el sueldo el viernes 6 de agosto, pero ese día nos dijeron que estaban con problemas de caja, que no tenían dinero y que el lunes nos iban a pagar. Llegó el lunes, no había plata en nuestra cuentas y nos informan que el dueño había desaparecido”, contó Barahona.
La mujer indicó que intentaron contactarse con los responsables, sin embargo, nadie sabía nada de ellos, de hecho la oficina central estaba desmantelada: “Algunos dicen que se arrancó a Argentina, otros dicen que está con crisis nerviosa… no sabemos nada de él”.
Ante esta situación, los trabajadores se contactaron con el abogado del dueño de la empresa, quien a través de un correo electrónico les habría indicado que podían vender los productos que quedaban en los módulos para costear sus sueldos. Algunos lo están haciendo, con carteles que señalan “su compra es nuestro sueldo”, pero Mariel asegura que esa no es la solución.
“El problema es que ellos nos tienen sin productos, entonces vendiendo lo que nos queda aún no nos alcanza para pagar los sueldos”, aseveró.
Por esta situación, los trabajadores recurrieron a la Inspección del Trabajo e interpusieron una demanda. Además, este miércoles un grupo de ellos presentarán su autodespido, ya que aseguran que es la única solución que tienen.
Una vez que se conoció esto en redes sociales, Peppermint Chile publicó un comunicado, en que la directiva apunta al rol de la administración que contrataron, asegurando que “las malas decisiones y una serie de problemas financieros” llevaron al déficit económico de la empresa.
“Hicimos todo lo posible para revertir la situación, iniciando por tomar nuevamente el control de la administración, nuevas estrategias de ventas, liquidación de los productos e incluso buscando aliados y financiamiento. Aunque lo intentamos todo, la situación fue irreversible”, se indicó en el escrito.
Incluso, afirman que bajo el contexto de la crisis que azota a muchas empresas, los directivos “perdieron su patrimonio familiar y se endeudaron hasta el último minuto para poder salvaguardar la situación”, pidiendo disculpas a los afectados, aunque sin hacer mención al pago de las deudas con los trabajadores.
Por el momento, los afectados continúan trabajando en los módulos, ya que la quiebra o cierre no se ha oficializado legalmente. Por ello, continúan con la incertidumbre sobre lo que ocurrirá, en especial, respecto a cuándo les pagarán lo adeudado.
BioBioChile intentó contactarse con alguno de los ejecutivos mencionados, pero no fue posible obtener respuesta.