Luego que el sindicato y la empresa no llegaran a acuerdo, los trabajadores de Walmart se encuentran desde ayer miércoles en huelga, la cual al menos se extenderá por cinco días.
En total son 139 los locales cerrados a nivel nacional, según indicaron los dirigentes. A través de un comunicado, en tanto, la compañía señaló que las tiendas SuperBodega aCuenta son las principales afectadas y que la paralización no afecta los servicios de ventas online.
La movilización arrancó en medio del proceso de automatización al interior de la empresa, que es parte de las demandas del Sindicato Interempresa Líder. “Si va a hacer las transformaciones, bien. Lo que estamos pidiendo es que sea con derechos y condiciones laborales que resguarden el empleo”, remarcó el presidente del sindicato, Juan Moreno.
A contramano, la vicepresidenta de Recursos Humanos de Walmart Chile, Mónica Tobar, acusó al titular de los trabajadores de decidir unilateralmente la paralización.
“No es que no llegamos a un acuerdo con los trabajadores. No llegamos a un acuerdo con Juan Moreno. Nosotros estábamos pagando 100% de un bono de movilización, un reajuste de sueldo base y, adicionalmente, un reajuste por la multifuncionalidad”, subrayó.
Sin embargo, más tarde, el dirigente sindical desestimó esas acusaciones.
Empleos en riesgo
Uno de los ejes centrales del petitorio sindical apunta a la automatización de las fuentes de trabajo, cuyo debate se extiende incluso más allá de Walmart y el retail.
Según un estudio de Clapes UC, del total de puestos de trabajo en Chile, un 17% está en alto riesgo de ser reemplazado por la tecnología, según aseguró el investigador Juan Bravo.
Ese grupo “tiene 70% o más de probabilidades de automatización. Estamos hablando de más de 1,3 millones de personas”, reveló.
El propio ministro del Trabajo, Nicolás Monckeberg, en medio de su llamado para que las partes vuelvan a conversar, remarcó que la automatización es un desafío tanto para las autoridades, las empresas y los sindicatos. “El empleo está cambiando. En Chile y el mundo. Nosotros tenemos que cambiar las normas, porque son para empleos que ya no existen. Cambiar la forma en que estamos capacitando en el Sence, como lo estamos haciendo”, aseguró.
Sin embargo, el presidente de la Confederación de la Producción y del Comercio, Alfonso Swett, precisó que la automatización debe ser enfrentada con planes de reconversión laboral más que capacitaciones en la misma área.
“Por ejemplo, hoy día estamos viendo cómo las cajeras están perdiendo su trabajo en los supermercados, estamos viendo que el Metro no tiene conductor, que los peajes ya no tienen cajeros. Ante ello ¿cuál es nuestra política nacional de reconversión?”, se preguntó.
El presidente de la Unión Nacional de Trabajadores, Segundo Steilen, señaló que los efectos negativos de la automatización aún no se intensifican. “Se nos va a venir más duro encima”, remarcó.
Con todo, según el estudio de Clapes UC, sectores como el transporte y la minería están expuestos a un mayor riesgo de automatización de funciones.