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Cuando el mercado se cruza con lo espiritual: El Kumbh Mela, una "máquina" de dinero para la India

Publicado por Verónica Reyes
La información es de Agencia EFE

14 enero 2025 | 13:04

La peregrinación masiva de fieles y turistas al Kumbh Mela, la reunión humana más multitudinaria del planeta, ha convertido este festival hindú en una máquina de generar dinero.

Suntuosos dormitorios o la presencia de marcas internacionales están detrás de esta vertiente menos tradicional de vivir el evento.

La previsión de que 450 millones de personas pasarán por este colosal festival en las seis próximas semanas ha llevado a las autoridades de la ciudad de Prayagraj, en el norte de la India, a no escatimar en gastos para dejar todo listo.

El magistrado adjunto del distrito de Prayagraj, Vivek Chaturvedi, dijo que el presupuesto destinado al festival ha sido de casi 1.000 millones de dólares, tanto para embellecer esta localidad del estado de Uttar Pradesh, como para levantar una ciudad efímera capaz de acoger a la marea de peregrinos.

Esto supone casi el doble que los 512 millones de dólares invertidos en 2019 para una edición intermedia de este festival hindú, conocida como Ardh Kumbh, que tiene lugar cada seis años y es de menor dimensión.

Como es habitual, algunos de estos gastos incluyen la construcción y modernización de carreteras, la instalación de decenas de miles de carteles, o la ampliación de la red de hoteles de la ciudad.


Pero una gran parte del dinero ha sido destinada a la ciudad temporal de unas 10.0000 hectáreas que se erige a las orillas del Ganges, con 160.000 refugios temporales y 150.000 baños, además de miles de puestos de venta de alimentación o recuerdos, y salas de exposiciones.

En su última edición en 2013, el Kumbh Mela generó casi 14.000 millones de dólares, según afirmó el jefe de Gobierno de Uttar Pradesh, Yogi Adityanath, en un evento organizado la semana pasada para fomentar el turismo local.

En comparación, este año se espera que esa cifra rebase los 23.000 millones de dólares, agregó.

Mil dólares por pasar una noche frente al Ganges

Según Chaturvedi, la licitación para explotar comercialmente los terrenos -que antes eran descampados- del Kumbh Mela, recibió ofertas de hasta 230.000 dólares por un solo emplazamiento, de entre los centenares que hay.

Una de estas empresas que se dedica al turismo de lujo es Evolife, que instaló una “ciudad domo” a unos pocos kilómetros de la urbe temporal, que ofrece a sus inquilinos pasar la noche por poco más de 1.000 dólares diarios.

“En total tenemos cincuenta habitaciones y estamos casi completos. Actualmente tenemos reservado entre el 80 y el 90%”, indicó Sriv, encargado de recepción.

Promocionada como una experiencia “donde el lujo se encuentra con la divinidad”, las habitaciones más baratas ascienden a 300 dólares por noche en los días normales -cuando el baño de los peregrinos en las aguas del Ganges, el Yamuna y el mítico Saraswati- no es considerado tan sagrado.


En las seis jornadas consideradas de mejores auspicios los precios rondan entre los 400 dólares por una cabaña de madera, o los 1.035 dólares por una habitación de lujo tipo domo con un exterior transparente y vistas al Ganges.

Este precio más elevado incluye desayuno, comida y cena, traslado hasta las zonas de baño, souvenirs, visitas guiadas por Prayagraj o la asistencia a eventos tradicionales.

Marcas globales

Otros negocios presentes en el Kumbh Mela son los de cadenas internacionales, como Domino’s o Coca Cola, lo que según Chaturvedi responde al interés creciente que el festival despierta entre los extranjeros.

Sandeep Kumar, gerente de la cadena local Coffee Day, ha viajado desde Nueva Delhi para supervisar el rendimiento de esta popular cafetería, que ha situado uno de sus puntos de venta en una de las vías principales que dirigen hacia los ríos.

Según sus cálculos, estima que el 5% de los asistentes al Kumbh Mela pasará por alguno de los puestos que han instalado en el festival, lo que les permitirá rentabilizar la inversión.

Un estímulo para la economía local


Dispuestos en hileras infinitas que llegan hasta donde alcanza la vista, en paralelo a las rutas que trasladan a los fieles hasta la confluencia de los ríos –en los que se bañan para purificar sus pecados y liberarse del ciclo de reencarnaciones-, miles de puestos de venta ambulante les ofrecen comida, agua, té, flores y todo tipo de necesidades básicas

Para preparar a los vendedores de cara a esta avalancha de gente, la oficial regional de turismo, Aparatija Singh, dijo al medio The Indian Express que 2.000 de estos pequeños comerciantes de Prayagraj han recibido formación de cara al festival.

Pero más allá de esta máquina de dinero en la que se ha convertido el Kumbh Mela, sigue girando en torno a la tradición, con el reparto de comida gratuita para aquellos que así lo deseen, sobre todo frente a los templos, además de baños sagrados y actividades de rezo que son gratuitas.

“El Kumbh Mela no está hecho para ganar dinero, ¿no?”, sentenció de manera retórica Chaturvedi.