Esta semana el dólar tocó los $1.000 influido principalmente por factores externos: en Estados Unidos la Reserva Federal (Fed) aplicó la tercera y última baja de los tipos de interés en este 2024.
Se trató de la tercera baja consecutiva desde septiembre, cuando el banco central estadounidense comenzó a flexibilizar su política monetaria. En esta ocasión, el recorte fue de un cuarto de punto (0,25) y dejó a los tipos de referencia en un rango de 4,25% al 4,5%.
Ayer el tipo de cambio amenazó nuevamente con los $1.000 ya que su precio promedio quedó a tan sólo $3 de ese valor.
Y este viernes durante sus primeros movimientos de apertura fluctuó entre $991 y $994.
El precio de los futuros de cobre, en tanto, registró nuevas caídas, alcanzando nuevos mínimos en un mes, “al mantenerse las preocupaciones por la demanda del metal”, indicó Ricardo Bustamante, subgerente de estudios de Capitaria.
Por otra parte, el Dollar Index, que refleja el comportamiento del dólar frente a las grandes divisas del mundo, muestra un ligero retroceso desde sus últimos máximos, “otorgando una lucha de fuerzas para el tipo de cambio”, dijo el experto.
Emanoelle Santos, analista de mercados XTB Latam, proyectó que la divisa chilena fluctúe entre $990 y $1.000 en comparación al billete verde a lo largo del día, influenciada por más noticias que se conocerán desde Estados Unidos.
“Los inversionistas se encuentran atentos a los datos del Índice de Precios de Gastos de Consumo Personal (PCE), una métrica clave de inflación preferida por la Reserva Federal, que se publicará más tarde en la jornada”, señaló.
Ese informe es especialmente relevante tras los comentarios recientes de la Fed, que señaló una expectativa de solo dos recortes de tasas en 2025, frente a las previsiones previas de hasta cuatro, lo que ha fortalecido al dólar a nivel global.