El Gobierno de Javier Milei reemplazó este lunes a la titular del organismo recaudador de impuestos, al nombrar al funcionario del Ministerio de Economía, Juan Pazo; una decisión que se suma a una larga lista de ministros y altos funcionarios destituidos en su primer año de gestión.
Según un decreto publicado en el Boletín Oficial, Milei removió de la Dirección Ejecutiva de la Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA), un ente autárquico que depende del Ministerio de Economía, a la abogada Florencia Misrahi, para reemplazarla por Pazo, un abogado que era el secretario de Coordinación de la Producción de la misma cartera.
El portavoz presidencial, Manuel Adorni había explicado en su cuenta de X (Twitter) que Milei tomó la decisión de “echar” a Misrahi y a otros dos funcionarios, “por la modificación al régimen de ´streamers´ e ´influencers´”.
Mile “echa” a jefa de impuestos por normativa de influencers
En esta línea, el comunicado oficial citado por Perfil apunta que la decisión de Misrahi de cambiar el régimen tributario a creadores de contenido y que, de esta forma, paguen impuestos, “fue tomada de manera inconsulta, y será revertida de manera inmediata tras su salida”.
“Este Gobierno no va a perseguir a las nuevas formas de negocios digitales y reafirma su compromiso para trabajar en un régimen tributario simplificado. La solución al persistente déficit fiscal que sufrió por décadas la República Argentina no es buscar nuevas formas de recaudación, sino bajar el gasto público”, agregaron.
Hasta el momento, este tipo de “rubro” no estaba especificado en la normativa argentina, respecto al pago de tributos.
Por su parte, Adorni también adelantó que el secretario de Finanzas, Pablo Quirno, asumirá el rol de secretario de Relaciones Económicas Internacionales de la Cancillería Argentina.
Una serie de despidos desde el gobierno argentino
Estos reemplazos se suman a los casos más resonantes, que son la remoción de cuatro ministros en el primer año de gestión de Milei, con frialdad y de forma conflictiva.
En octubre pasado, Milei reemplazó a la canciller y economista Diana Mondino -por haber permitido un voto a favor de Cuba en la ONU- por el actual veterinario y empresario Gerardo Werthein. Esto ha sido interpretado en el ambiente diplomático como “una zancadilla”, en un contexto de alineamiento de la política exterior a EEUU e Israel y después de haberle recortado funciones a la ministra.
Milei encargó a Werthein hacer una purga en la Cancillería para identificar a los diplomáticos “enemigos de las agendas de la libertad”.
En septiembre pasado renunció el entonces ministro de Salud, el cardiólogo Mario Russo, y fue reemplazado por otro cardiólogo y empresario Mario Lugones, de quien se afirma que ya ejercía el verdadero poder en la cartera y una cercanía personal, a través de su hijo, con el asesor presidencial Santiago Caputo.
En mayo pasado, Milei desplazó a su jefe de Gabinete y amigo personal, Nicolás Posse -por “la diferencia de criterios y expectativas”- y lo reemplazó por quien era el ministro del Interior, Guillermo Francos: “(Posse) que fue eyectado, hace 18 años que era amigo. No cumplió los objetivos y se fue. Pista, afuera, Acá hay que cumplir los objetivos. El que no los cumple, por más que lo conozca hace 20 años, afuera”, justificó luego el ultraderechista.
El primer ministro en irse fue el de Infraestructura, Guillermo Ferraro, quien falleció el 4 de diciembre, y había sido el encargado de la fiscalización del partido de Milei, pero en febrero pasado fue desplazado, se eliminó la cartera y sus competencias fueron absorbidas por Economía.
Los ministros destituidos son parte de los 99 altos funcionarios desplazados en el primer año de gestión de Milei -entre secretarios, subsecretarios y titulares de organismos públicos-, según contabilizó el politólogo Pablo Salinas en su cuenta de X, uno cada cuatro días de gestión.