El gravamen nació hace cinco años con Alberto Fernández como una medida de “emergencia” para nutrir al Estado y frenar la demanda de dólares, refugio básico de los ahorristas ante la escalada inflacionaria.
Nació “transitorio” como tantos otros tributos en Argentina y se quedó por cinco años. El impuesto Para una Argentina Inclusiva y Solidaria (PAIS) llegará a su final el 22 de diciembre y permitirá abaratar hasta un 30% aquellas transacciones particulares con moneda extranjera -el famoso “cepo al dólar”- en rubros como turismo, mercadería en general, tecnología, streaming y más. Además, agilizará el ritmo de las importaciones y el comercio, ya con una alícuota que fue recortada semanas atrás.
Pese a las complicaciones que trajo para los bolsillos de los ciudadanos trasandinos, el impuesto PAIS fue vital para que el Estado recaudara en los tiempos de Alberto Fernández frente a la sangría de dólares en las reservas del Banco Central y favoreciera luego al gobierno de Javier Milei en su meta de alcanzar el superávit fiscal primario y financiero, en pleno ajuste.
Un impuesto que duró cinco años y dio lugar al “dólar solidario”
Utilizado para encarecer el dólar de importación y así desalentar la demanda de divisas en el Banco Central, el impuesto PAIS fue creado por la Ley de Emergencia N° 27.541, impulsada por el presidente Alberto Fernández en diciembre de 2019, apenas asumió, y tenía un plazo limitado a cinco períodos fiscales a partir de su implementación. Es decir, que culminará su vigencia el 23 de diciembre próximo, tal como ya confirmó el ministro de Economía argentino, Luis Caputo. Tampoco será reemplazado, pese a algunos rumores que circularon. Sí continuará una percepción del 30% a cuenta del Impuesto a las Ganancias y Bienes Personales, que es devuelta al año siguiente en caso de que la persona no esté alcanzada.
En Argentina, varios gravámenes que se suponían de “emergencia” se quedaron para siempre. Por ejemplo, el impuesto al cheque.
Cuando en 2021 era candidato a diputado nacional por la Ciudad de Buenos Aires, Javier Milei expresó: “Prefiero cortarme un brazo antes que subir los impuestos”. Una de sus promesas de campaña como presidente fue el levantamiento del cepo al dólar, que ahora empieza a tomar forma de cara al 2025.
El impuesto PAIS aplicó sobre operaciones en moneda extranjera. Inicialmente, gravó la compra del dólar para ahorro, resguardo de los argentinos ante la por entonces galopante inflación, por lo que su cotización recibió el nombre de “dólar solidario”. Pero, luego, tomó mayor alcance, afectando a turismo en el exterior, bienes y otros servicios, en torno al 30% de recargo, y a las plataformas de streaming (8%).
En su último año de gestión, Fernández impuso un 7,5% de impuesto PAIS para toda importación y servicios de flete, además de una serie de permisos y trabas burocráticas que afectaron a la disponibilidad de bienes y encarecieron aún más los precios al consumidor.
Javier Milei y la eliminación de impuestos
Apenas asumió en diciembre de 2023, Milei amplió la alícuota del 7,5% al 17,5%, con la promesa de reducirla, algo que cumplió en septiembre ya con las arcas reforzadas. El impacto de la medida se vio en la estabilización de precios de alimentos enlatados, artículos de informática y maquinaria extranjera para la industria agrícola, por nombrar tres ejemplos sencillos.
Además, el gobierno libertario eliminó a fines de noviembre la retención del pago del 95% del impuesto PAIS que la Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA), el fisco argentino, exigía como anticipo para acceder a divisas para el pago de importaciones. De esta forma, el tipo de cambio implícito para la importación se volvió más barato.
Según datos de la ex AFIP, hoy rebautizada como ARCA, entre enero y octubre de 2024, la recaudación del impuesto PAIS subió un 65% en términos reales en comparación a los mismos diez meses del año anterior. En 2020, el tributo se tradujo entonces a un 2,03% de participación sobre el total de los impuestos existentes, mientras que en lo que va de 2024 creció a una representación del 5,49%.
En tanto, un informe del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (Iaraf) indicó que el impuesto PAIS se despedirá con una recaudación total que impactó en un aporte del 3,05% del PBI trasandino. “Muere el impuesto PAIS, aportando USD 17.300 millones durante sus cinco años de vida. El gran desafío fiscal de sustituir su recaudación en 2025”, advirtió la entidad.
Cómo beneficia el fin del impuesto PAIS a los argentinos
Desde el 23 de diciembre, los argentinos accederán a una cotización más baja del “dólar tarjeta”, es decir, la que interviene en toda compra hecha en el exterior y que requiere divisas. Actualmente, se ubica por encima de los 1.600 pesos argentinos: se conforma por la cotización del dólar oficial en el banco (1.040 pesos) más un 30% de impuesto PAIS y otro recargo temporal del 30% a cuenta del Impuesto a las Ganancias y Bienes Personales. Con la eliminación del tributo “solidario”, quedaría en el rango de los 1.300 pesos.
De todos modos, los argentinos, famosos por su astucia a la hora de hacer rendir el dinero, utilizan otra táctica para ahorrar con el plástico y evitar los impuestos: pagan el resumen de la tarjeta de crédito directamente con dólares depositados en la caja de ahorro. Así no hay conversión de divisas.
Otro beneficio por el fin del impuesto PAIS se verá en los precios de los automóviles 0km. BioBioChile ya analizó cómo Argentina tiene los más caros en la región: sus habitantes necesitan hasta 75 salarios mínimos para comprar uno nuevo (en Chile alcanza con reunir 16).
A partir de la decisión de no cobrar más el adelanto que se retenía en la Aduana sobre las importaciones, las empresas automotrices adelantaron una caída en los precios, que podría intensificarse en enero. Ford redujo entre 1% y 10% el valor de algunos modelos como las camionetas Bronco y Maverick, en tanto que Toyota bajó un 3% los modelos Yaris, Corolla y Corolla Cross.
Respecto al streaming, las suscripciones a Netflix, Spotify, Amazon Prime Video y similares se reducirán en un 8%. Los argentinos seguirán pagando como recargos un 21% de Impuesto al Valor Agregado (IVA) y otro 30% a cuenta de Ganancias y Bienes Personales. El plan estándar de Netflix, entonces, pasará de los actuales 11.446 pesos argentinos (10.720 chilenos) a 10.870 pesos argentinos (10.180 chilenos).