Ante la “ventaja territorial” tras la segunda vuelta de gobernadores, el oficialismo considera que esta sería “la prueba” para que la derecha garantice una expedita tramitación de la agenda legislativa del Gobierno.
Con ello apuntaron principalmente a la reforma previsional, asegurando que si la oposición tiene aspiraciones de llegar a La Moneda, debe tener claro que la ciudadanía “exige cambios”.
Todo esto se da en el marco de las nueve sesiones que le quedan al proyecto para ser despachado en el Congreso.
“Gobernanza territorial”
Diez versus seis. Esas fueron las gobernaciones que ganó el oficialismo sobre la derecha desde el punto de vista de la “gobernanza territorial”.
Esta ventaja, según los propios adherentes al Gobierno, sería un “nuevo aire” para tramitar de forma más expedita la agenda legislativa en el Congreso y, en particular, la reforma previsional.
Si bien este proyecto -de los más emblemáticos del Gobierno- ya cuenta con un cronograma y fecha límite para su tramitación, tiene pendientes los análisis de los temas más complejos por delante.Según Gastón Saavedra, senador socialista, la oposición estuvo esperando los resultados de las elecciones para dar los pasos tendientes a abrirse o no a profundizar -o dar avances- en la reforma previsional.
El legislador emplazó, por tanto y según dicha teoría, a que se avance al respecto.
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Sin embargo, esta relación “causa-efecto” molestó de cierto modo a la oposición; que aseguró que son debates que van por caminos separados.
El senador de la UDI, Juan Antonio Coloma, garantizó que se van a respetar los plazos, haciendo un llamado a “reconocer los avances”.
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A la Comisión de Trabajo del Senado le quedan solo cuatro sesiones para despachar la reforma (mañana 27 de noviembre; y el 4, 11 y 18 de diciembre). Sin embargo, el oficialismo aseguró que han pedido agregar nuevas sesiones.