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El canciller alemán, Olaf Scholz, resaltó la necesidad de modernizar Alemania y su modelo económico para volver al crecimiento, enfatizando que la mano de obra cualificada extranjera es esencial. Scholz advirtió sobre el rápido envejecimiento de la población activa y la posible escasez de hasta cinco millones de trabajadores para 2030. Instó a atraer más trabajadores cualificados del extranjero, destacando la importancia de aumentar la productividad e innovación. El canciller mencionó los impactos de la guerra en Ucrania en la economía alemana y prometió medidas para fomentar el crecimiento, como reducir la burocracia, fortalecer el sector financiero y asegurar un suministro energético sostenible. Scholz convocará a empresas, asociaciones e sindicatos para discutir un "pacto para la industria y el empleo" en busca de soluciones.

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El canciller alemán, Olaf Scholz, subrayó este martes la importancia de modernizar el país y el modelo económico para volver en Alemania a la senda del crecimiento, para lo cual, añadió, la mano de obra cualificada del extranjero es imprescindible.

“La historia completa es que necesitamos modernizar nuestro país y todo nuestro modelo económico (…) y para esta modernización necesitamos más mano de obra cualificada”, dijo en un discurso en la Jornada de la Federación Alemana de Asociaciones de Empleadores (BDA).

Scholz advirtió del rápido envejecimiento y decrecimiento de la población activa si no se toman las medidas necesarias y señaló que para 2030, en sólo seis años, podrían faltar hasta cinco millones de trabajadores en todos los sectores empresariales, la administración y la salud.

“Pero no sólo necesitamos más mano de obra, como en la época del ‘milagro económico’: hoy necesitamos, sobre todo, más mano de obra cualificada”, insistió y agregó que ésta además aumentará la productividad y la fuerza innovadora.

El canciller instó a hacer un esfuerzo mucho mayor para atraer mano de obra cualificada del extranjero, para lo cual es necesario acelerar y facilitar todos los procesos necesarios, y llamó a las empresas a contratar empleados de fuera de Alemania.

“Hoy y en las próximas décadas, necesitamos más mano de obra en Alemania. Pero no los necesitamos, como en 1964, para impulsar una economía ya en auge con mano de obra barata”, dijo, y añadió que la situación actual es completamente distinta, con la economía alemana estancada.

Scholz se refirió a la guerra de agresión rusa en Ucrania que ha golpeado duramente la economía alemana y causado una crisis energética, la inflación, la subida de los tipos de interés, los conflictos geopolíticos, las tensiones en las cadenas de suministro, de los que Alemania, como país industrializado y orientado a la exportación, se ha visto más afectado que otros, añadió.

“Juntos, tenemos que salir de esta mala situación”, dijo, y agregó: “Necesitamos más crecimiento”.

Por eso, agregó, el Gobierno ha adoptado un amplio paquete de medidas que aborda los principales factores de crecimiento y que incluyen reducir la burocracia innecesaria, reforzar la posición de Alemania como centro financiero, incentivar la inversión y lograr un suministro energético asequible, seguro y sostenible.

“Alemania es un país industrializado; a diferencia de otros, nunca hemos renunciado a nuestra industria”, dijo, a modo de promesa, y anunció que antes de que acabe el mes empresas, asociaciones industriales y sindicatos se reunirán en la Cancillería a invitación de Scholz para una primera conversación sobre un “pacto para la industria y el empleo”.