Cuando el Gobierno comunicó el nuevo beneficio para ayudar a que las personas de la clase media puedan adquirir viviendas nuevas, ya sea casa o departamento (beneficio tributario extraordinario para la adquisición de viviendas nuevas), detalló que en el país existe un gran stock de propiedades nuevas que no se han vendido ante la contingencia económica y condiciones del mercado.
El presidente de la Cámara Chilena de la Construcción (CChC), Juan Armando Vicuña, señaló que que ese stock ascendería a al menos 113.000.
El ministro de Hacienda, Mario Marcel, explicó que eso último además se convirtió en “un obstáculo, una limitación” para el inicio de nuevas inversiones en viviendas habitacionales. Por lo que es necesario también volver a dinamizar al sector de la construcción, que es uno de los que genera más empleo en el país.
En este contexto, y según información rescatada por Diario Financiero, el Ejecutivo -a través del Ministerio de la Vivienda (Minvu)- estaría analizando a posibilidad de adquirir parte del sobrestock de propiedades que existe actualmente en el país.
“Estoy hablando de viviendas entre las UF 1.600 y UF 1.800, que podría ser razonable comprarlas. A ellos les convendría mover este sobrestock que tienen”, señaló el ministro de Vivienda, Carlos Montes, durante una sesión de la comisión de Hacienda del Senado.
La autoridad confirmó que están trabajando en esa idea, que aún no es algo que esté definido y que una eventual adquisición se realizaría siempre que los precios se encuentren dentro del rango que tiene el sector público.
Déficit habitacional
Según un reporte de prensa de la Cámara Alta (del 24 de noviembre), la Comisión de Vivienda recibió a representantes de la Cámara Chilena de la Construcción, que entregaron estadísticas sobre el déficit habitacional en el país, explicando diferencias con los datos del Minvu.
Conforme al sector privado, existe una necesidad total de soluciones habitacionales “de 1 millón 89 mil viviendas a nivel nacional”, lo que contrasta con la cifra oficial entregada por el Gobierno, que indicó que ese número es un poco más de 600 mil.
La CChC señaló que esa cifra se desglosa con 935 mil requerimientos (161 mil allegados hacinados, 441 mil allegados por incapacidad financiera y 333 mil viviendas irreparables) más 114 mil familias viviendo en campamentos y 40 mil personas en situación de calle.
“La principal diferencia entre las cifras oficiales y éstas, se da en las viviendas irreparables, que la CChC fijó en un número muchísimo mayor”, señaló el reporte de prensa del Senado.