El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, reiteró este miércoles que los legisladores republicanos se tomaron a la economía “como rehén” al condicionar la suspensión del techo de deuda a la aprobación de importantes recortes del gasto público.
“Están haciendo lo que ningún partido político ha hecho en la historia de la nación. Literalmente están tomando la economía como rehén”, dijo en un discurso pronunciado durante una visita a las afueras de Nueva York.
Biden se expresó así un día después de que su reunión con el líder de la mayoría republicana en la Cámara de Representantes, Kevin McCarthy, se cerrase sin avances sobre un posible acuerdo para evitar el impago de la deuda nacional, cuyo límite de 31,4 billones de dólares ya se alcanzó el 19 de enero, por lo que actualmente el Gobierno está recurriendo a dinero en sus reservas para pagar las deudas que ha contraído.
El Departamento del Tesoro estima que esas reservas se agotarán el 1 de junio, momento en que EEUU entraría automáticamente en una suspensión de pagos, la primera de su historia.
Biden insistió en que eso sería devastador para la economía del país, con una recesión y millones de empleos perdidos, y también para el resto del mundo.
La Casa Blanca ha descartado hasta ahora negociar recortes presupuestarios para facilitar la suspensión del techo de deuda, subrayando que por responsabilidad los republicanos tienen que garantizar que el país puede pagar a sus acreedores y que, luego, se podrán discutir las cuentas.
En ese sentido, Biden recordó que bajo el Gobierno de Donald Trump (2017-2021) los republicanos apoyaron hasta en tres ocasiones elevar el techo a pesar de que con esa Administración se vio un enorme aumento de la deuda pública.
Sobre las exigencias presupuestarias de los republicanos, el presidente insistió en que acarrearían enormes recortes a programas públicos de los que se benefician las familias de clase media y veteranos de guerra, obligarían a prescindir de grandes números de agentes de policía y maestros o a cerrar torres de control aéreo, entre muchas otras cosas.
Mientras, recalcó, el Partido Republicano busca extender las rebajas fiscales que Trump dio a empresas y a las grandes fortunas.
Según algunos analistas, con el lugar elegido por Biden para este discurso, el presidente buscó presionar a los legisladores republicanos que representan a esta zona suburbana situada al norte de la ciudad de Nueva York, en general moderados, para que apoyen la subida del techo de la deuda.
El área, al mismo tiempo, es una de las que puede resultar clave desde el punto de vista electoral: en los últimos comicios, los republicanos sorprendieron aquí con resultados mejores de lo previsto y se llevaron varios asientos que contribuyeron a darles el control de la Cámara de Representantes en Washington.
Lo hicieron, en general, por márgenes muy ajustados y los demócratas confían en poder retomar varios de estos distritos en 2024, cuando aspirarán a recuperar la mayoría en la Cámara Baja.