La Reserva Federal decidió este miércoles subir los tipos un cuarto de punto, después de la quiebra de dos bancos en las últimas semanas, el Silicon Valley Bank (SVB) y el Signature Bank, cuya situación financiera empeoró por la política monetaria del organismo, y el rescate de un tercero, el First Republic Bank.
El pánico cruzó el Atlántico y casi acabó con Credit Suisse, que tuvo que ser adquirido por su competidor (UBS) a insistencia del gobierno, ya que la crisis de confianza que sufría estaba hundiendo su cotización en el mercado y se temía su quiebra.
En las últimas horas, las acciones de los bancos UBS y Credit Suisse, en el centro de la tormenta bancaria que ha vivido Suiza en la última semana, se mantuvieron estables, con una ligera tendencia a la baja, tras la subida de los tipos de interés acometida por la Reserva Federal de Estados Unidos, de 25 puntos básicos.
Los títulos de Credit Suisse, que en los próximos meses será absorbido por UBS tras un acuerdo alcanzado en este sentido, bajaban un 0,67% en la apertura de la Bolsa de Valores de Zúrich.
UBS, que se convertirá en el indiscutible número uno de la banca helvética una vez que se finalice esa operación, registró un retroceso del 0,64% de sus acciones.
El indicador SMI de la bolsa suiza registraba un descenso de 0,75%.
Tras una primera reacción agria de los inversores que en particular afectó a UBS, tras conocerse el acuerdo, los títulos de este establecimiento se han recuperado de manera regular y hoy se cotizan en 18,56 francos suizos, frente a 14,68 francos del pasado lunes.