El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha criticado el plan fiscal del Reino Unido al considerar que es inadecuado en el actual contexto de alta inflación y porque “probablemente incrementará la desigualdad” al favorecer a las rentas altas.
El organismo multilateral precisa en un comunicado que está “siguiendo de cerca” los pasos del Gobierno conservador británico, al que anima a modificar su programa de crecimiento, basado en grandes recortes de impuestos junto con medidas para aumentar la productividad.
“Entendemos que el considerable paquete fiscal anunciado tiene como objetivo ayudar a las familias y las empresas a lidiar con el ‘shock’ energético y a impulsar el crecimiento a través de recortes de impuestos y medidas por la parte de la oferta”, afirma el FMI.
“Sin embargo, dadas las elevadas presiones inflacionarias en muchos países, incluido el Reino Unido, no recomendamos en este momento paquetes fiscales grandes y sin objetivos específicos, pues es importante que la política fiscal no funcione de forma contraria a la política monetaria”, añade, en alusión a la tendencia en el Banco de Inglaterra a subir los tipos de interés.
El FMI advierte además que “la naturaleza de las medidas del Reino Unido probablemente aumentará la desigualdad”, dado que se reduce del 45 al 40% la banda más alta del impuesto sobre la renta y se eliminan la subida prevista del impuesto de sociedades y el tope a los bonos de los banqueros.
El organismo sugiere que el ministro de Economía, Kwasi Kwarteng, aproveche una comparecencia parlamentaria fijada para el 23 de noviembre para “sopesar formas de brindar un apoyo más específico y reevaluar las medidas fiscales, especialmente aquellas que benefician a las personas con altos ingresos”.
Ese día, Kwarteng prevé detallar su plan para reducir el déficit presupuestario y la deuda neta “a medio plazo”, en un intento por tranquilizar a los mercados y frenar la caída de la libra, que el paso lunes se desplomó frente al dólar por la inquietud en torno a las finanzas británicas.