El precio del petróleo intermedio de Texas (WTI) abrió este viernes con una bajada del 1,29%, hasta los 116,07 dólares el barril, para encarar el final de una semana volátil de abultadas subidas y bajadas tanto por el desequilibrio entre la oferta y la demanda como por el temor a un fuerte desaceleramiento de la economía tras la subida de los tipos de interés por varios bancos centrales.
A las 09.00 hora local de Nueva York, los contratos futuros del WTI para entrega en julio se dejaban 1,52 dólares con respecto al cierre de la sesión anterior.
El petróleo de referencia en Estados Unidos arrancaba la jornada en negativo después de cerrar ayer con una subida del 2% y el miércoles con una caída del 3%.
El oro negro estadounidense parece encaminarse a cerrar un cómputo semanal negativo después de que la semana pasada, el precio superara la barrera psicológica de los 120 dólares y el viernes pasado cerrara en 120,67 dólares el barril.
Ayer, el precio del petróleo, que al igual que hoy comenzó a la baja, cambió de signo después de que el Departamento del Tesoro de EEUU anunció sanciones contra una red de compañías iraníes así como empresas fachada ubicadas en China y Emiratos Árabes Unidos (EAU), utilizadas para esquivar el veto comercial contra la industria petroquímica iraní.
El Tesoro bloqueó todas las propiedades en Estados Unidos de las empresas y las personas sancionadas, y les prohibió hacer transacciones bajo la legislación estadounidense.
Según la firma Sevens Reprot, a corto plazo el WTI podría acercarse a la baja hasta los 110 dólares el barril “pero a largo plazo, la perspectiva sigue siendo claramente alcista dado el desequilibrio entre la oferta y la demanda causado por las sanciones a Rusia” por su invasión de Ucrania.