La Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) anunció este miércoles una subida del tipo de interés oficial de 0,75 puntos, el mayor aumento en 28 años, para luchar contra una inflación desbocada.
Con este incremento -que es el tercero desde que la Fed empezó a subir tipos en marzo-, el tipo de interés oficial de la mayor economía del mundo pasa a situarse en una horquilla de entre el 1,5% y el 1,75%.
En un comunicado oficial al término de su reunión de dos días, la Junta de Gobernadores del sistema de la Reserva Federal adelantó, además, que espera llevar a cabo más subidas de los tipos en el futuro.
Se trata de la mayor subida de tipos desde 1994, cuando el demócrata Bill Clinton se encontraba al frente de la Casa Blanca y la Fed estaba dirigida por el histórico Alan Greenspan.
Por otro lado, la Fed anunció que seguirá reduciendo su cartera de deuda pública del Gobierno de EEUU, compuesta fundamentalmente de letras del Tesoro y de valores respaldados por préstamos hipotecarios.
En la actualidad, el banco central acumula unos 9 billones de dólares en deuda estadounidense.
Como ya ha hecho en junio, la Fed se desprenderá en julio y agosto de 30.000 millones de dólares en letras del Tesoro y de 17.500 millones en valores respaldados por hipotecas cada mes.
A partir de septiembre, estas cifras mensuales subirán a 60.000 millones de dólares y 35.000 millones respectivamente, y el proceso concluirá cuando se alcancen unos niveles que se consideren “ligeramente por encima” de lo que el banco considera “reservas amplias”.
“El comité está fuertemente comprometido con el objetivo de devolver la inflación al 2%”, indicó el banco central estadounidense.
El viernes pasado se conoció que la inflación de Estados Unidos se disparó en mayo hasta su tasa más alta de los últimos 40 años, el 8,6%, una nueva escalada de los precios de consumo empujada sobre todo por el fuerte encarecimiento de la energía.
Justo un día después, el sábado, el precio de un galón de gasolina (3,78 litros) en las gasolineras del país alcanzó los 5 dólares, una cifra jamás antes registrada.