Un grupo de diputados -encabezados por el socialista Daniel Manouchehri- presentó una moción para borrar los registros de deudas -no así la deuda- que sean inferiores a $2,5 millones y previas al 30 de abril de 2022.
El proyecto, conocido como “Chao Dicom”, se discutirá en la presente jornada en la Comisión de Economía y ha generado reacciones en la banca.
Desde el Retail Financiero calificaron lo anterior como una “mala” política pública, profundizando que podría generar falsas expectativas y afectar la moralidad de pago.
Conforme a Diario Financiero, Claudio Ortiz, vicepresidente del Retail Financiero, explicó que terminará “afectando a aquellas personas que a través de un crédito, quieran financiar algún proyecto”; y que al borrar a personas de los registros afectará a los emisores de créditos.
En la misma línea, la Asociación de Bancos e Instituciones Financieras (Abif) apuntó a efectos negativos.
De acuerdo al citado medio, indicaron que contar con el historial permite “mejorar el acceso a crédito, reducir los costos del crédito y evitar el sobre endeudamiento”.
El proyecto que busca sacar adelante el diputado Manouchehri contó con apoyos de parlamentarios de Renovación Nacional, Democracia Cristiana y del Partido Comunista.
Especifica que “los responsables de los registros no podrán comunicar, desde la vigencia de esta ley, los datos relativos a obligaciones que se hayan hecho exigibles antes del 30 de abril de 2022 y se encuentren impagas, siempre que el total de obligaciones impagas (…) sea inferior a $2.500.000 por concepto de capital, excluyendo intereses, reajustes o cualquier otro rubro”.