China autorizó la reapertura de minas de carbón por un período de un año en momentos en que el país, que aspira a llegar a la neutralidad carbono antes de 2060, asiste a una creciente demanda de electricidad.
La red eléctrica tuvo que hacer frente a devastadoras tormentas, fuertes calores que aumentaron el consumo del aire acondicionado, y a la recuperación de la segunda economía del mundo.
En este contexto, la poderosa agencia de planificación china dio luz verde el miércoles a la reapertura de 15 minas.
La semana pasada, las autoridades ya autorizaron la reapertura de 38 minas de carbón en Mongolia interior.
A fines de 2020, China debió racionar la electricidad, en un contexto de penuria de carbón.
China, primer emisor mundial de gases de efecto invernadero, es el país que invierte más en las nuevas energías, y el gobierno de Pekín ha prometido llegar a la neutralidad carbono antes de 2060.
El país lanzó en julio su mercado de carbono para ayudar a reducir las emisiones contaminantes. Este mecanismo fija por primera vez topes de contaminación para las empresas.