Gremios de la industria frutícola encendieron las alarmas sobre la dificultad para encontrar trabajadores disponibles, de cara al periodo de cosecha que comienza en octubre próximo.
A nivel nacional, afirman que el déficit de mano de obra llega a un 50%, mientras sectores como el comercio y la construcción concuerdan en la dificultad para completar las vacantes disponibles.
Golpe al empleo, recuperación y falta de mano de obra
Ha pasado casi un año desde el impacto más duro que tuvo la pandemia sobre el mercado laboral, en julio del año 2020, y si bien esa recuperación está a medio camino, hay un consenso técnico y de organizaciones internacionales respecto de que el empleo es una de las grandes cicatrices que dejará la crisis sanitaria sobre la economía.
Lo decían los datos del INE: queda cerca de un millón de plazas laborales por recuperar, pero un gran problema ha sido el aumento de los desalentados. Personas que no buscan trabajo a causa de la pandemia.
En la medición de marzo-abril-mayo, se constató una disminución importante de la fuerza de trabajo, 150 mil personas que salieron de esta condición en relación al primer trimestre. La tasa combinada de desempleados y fuerza de trabajo potencial, además, llega a 20,9%.
Otros informes, como el del Centro de Estudios Longitudinales UC, cifran –durante la última semana de mayo- en poco más de un millón las personas que declaran que, si no fuera por la pandemia, buscarían trabajo.
Y si bien la actividad económica ha recuperado niveles de productividad, este rezago en el mercado laboral trae complicaciones.
En la industria agrícola, por ejemplo, un estudio de la Federación de Productores de Fruta de Chile afirma que el promedio nacional de falta de trabajadores para labores agrícolas, en este momento, es de un 49,2%.
Esto ya los pone en un escenario complejo con miras a las cosechas de octubre, principalmente de cerezas, donde manteniendo este ritmo podría haber un déficit de 150 mil trabajadores y trabajadoras. Así lo explica el presidente de Fedefruta, Jorge Valenzuela, quien afirma que es la situación más compleja que han vivido.
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Dentro de la encuesta del gremio frutícola se apunta a que, por ejemplo, en un 92% de los casos los trabajadores no están disponibles por temor a perder beneficios del Estado; en un 36% de los casos, problemas para poder contratar trabajadores extranjeros; en un 28,3% son las labores domésticas, principalmente en mujeres, las que no dejan tiempo para buscar trabajo.
En un 20,3% de los casos, además, es por temor al contagio.
Pero este no es un problema exclusivo de la agricultura: en industrias como la construcción también han advertido este problema.
Este sector se ha puesto de pie a comienzos de este año, y aunque han recuperado en torno a 225 mil plazas laborales, restarían unas 75 mil para volver a niveles prepandemia. Así lo explica el gerente de estudios de la Cámara Chilena de la Construcción, Javier Hurtado, quien dice que es en el empleo formal donde tienen el mayor desafío.
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Comercio
Hay sectores que viven un caso particular. El comercio se ha recuperado con fuerza y de la mano del cambio tecnológico, aunque aún con 200 mil trabajadores menos que antes de la pandemia.
Tiene que ver con que casi un tercio de los trabajadores son informales y se ven golpeados por las restricciones sanitarias, pero por ejemplo, de acuerdo a la última Encuesta Nacional de Demanda Laboral, un 57% de las empresas dijeron tener dificultades con llenar vacantes.
La gerenta de Estudios de la Cámara Nacional de Comercio, Bernardita Silva, explicó que esto tiene que ver con los cambios tecnológicos que ha acelerado el contexto de pandemia.
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Si miramos, por ejemplo, cifras que entregan portales de búsqueda de empleo como Trabajando.com, señalan que las vacantes de empleo han aumentado en 277 mil los últimos doce meses.
Los rubros que lideran son la industria con un 125% más de empleos, 140% en transporte y logística, 77% en agricultura, 88% en salud y atención, 80% en comercio y 65% en información y comunicaciones.