Las acciones de la aerolínea Latam se desplomaron más de un 37% este martes en la tarde en la Bolsa de Santiago, luego que se acogiera a la Ley de Quiebras en Estados Unidos debido a los perjuicios causados por la crisis del coronavirus.
Latam perdió -a las 14:50 horas- 37,51% a un valor de $1.250 por acción.
En Wall Street, en tanto, su cotización fue suspendida como ocurre cuando una empresa se acoge a la mencionada ley.
Esta fuerte caída se produjo luego que la firma anunciara durante la madrugada su decisión de acogerse -en sus filiales en Chile, Perú, Ecuador y Colombia- a una reorganización voluntaria bajo la protección del Capítulo 11 en los Estados Unidos, tras la drástica caída de la actividad aérea causada por la pandemia.
Cabe precisar que el Capítulo 11 de la Ley de Quiebras de Estados Unidos es un proceso diferente del concepto de reorganización en otros países y no es un procedimiento de liquidación.
Dicho estatuto proporciona a la empresa en cuestión una oportunidad para trabajar -sin la presión de los acreedores y otras partes interesadas- en reducir la deuda; y abordar los desafíos comerciales con nuevas fuentes de financiamiento.
Antes de la pandemia, Latam volaba a 145 destinos en 26 países y efectuaba alrededor de 1.400 vuelos diarios.
El anuncio de Latam ocurre dos semanas después de que la colombiana Avianca, la segunda aerolínea de América Latina, solicitase también acogerse a la ley de bancarrota en Estados Unidos para reorganizar su deuda “debido al impacto imprevisible de la pandemia” en sus negocios.
Según la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA), las aerolíneas latinoamericanas perderán US$15.000 millones en ingresos este año, en la peor crisis en la historia del sector.
Gobierno asegura que es la única gran empresa en esta situación
El ministro de Hacienda, Ignacio Briones, se refirió al panorama que vive Latam.
“Hemos hecho un barrido respecto a todas las empresas grandes de Chile, analizándolas una por una (…) y les puedo asegurar que no vemos ninguna empresa de las grandes que esté en una situación cercana a la de Latam”, expresó.
Respecto a la posibilidad de que el Estado ayude a una compañía de gran tamaño, Briones fue tajante en señalar, nuevamente, que en caso de que ello ocurra se hará de forma extremadamente selectiva.
El jefe de las finanzas públicas reiteró que en caso de que se concrete lo anterior, siempre será “una ayuda para la empresa, no para sus dueños” y que “claramente” no tendrían las mismas garantías con las que se ayuda, por ejemplo, a una Pyme.