El Gobierno y el oficialismo iniciaron un despliegue para defender la reforma tributaria, una “salida a terreno del presidente” Sebastián Piñera y el equipo económico de La Moneda para enfrentar el negativo informe de la comisión técnica de la oposición.
Ésta sugirió a los diputados de la centroizquierda no aprobar la idea de legislar, ya que aseguran que el proyecto es regresivo y disminuye la recaudación fiscal.
Un voto en la comisión de Hacienda o seis votos en la sala es lo que necesita el gobierno, que ve muy difícil que haya un acuerdo transversal e irán por los votos partidos que han elegido un camino “no obstruccionista”, los que serían la Democracia Cristiana y el Partido Radical, dejó entrever el ministro de la Secretaría General de la Presidencia, Gonzalo Blumel.
En una actividad en la comuna de Independencia, el Mandatario destacó los acentos que tiene la reforma, señalando que es pro-crecimiento, pro-empleo y que da certeza jurídica, haciendo un llamado a la oposición a no dar un portazo.
Revisar algunas exenciones tributarias sería la alternativa del Gobierno para destrabar la reforma tributaria y acentuar la progresividad del sistema. El ministro de Hacienda, Felipe Larraín, abordó la recomendación que hicieron los técnicos de la oposición.
Sin embargo, el diputado del Partido Comunista, Daniel Núñez, señaló que no hay ninguna condición política para votar a favor de la idea de legislar en marzo. Que el Gobierno tiene que ceder.
El presidente de la Comisión de Hacienda de la Cámara, el diputado de la Democracia Cristiana, Pablo Lorenzini, señaló que la discusión es política y no sólo técnica, agregando que tomarán unos días más para conversar como oposición y seguir dialogando con el Ejecutivo, considerando que quedaron temas pendientes.
En la misma instancia tienen prevista la votación en general del proyecto la semana del 18 de marzo. Se anticipa como clave una reunión a realizarse el martes de los integrantes de oposición de la comisión para ir despejando posiciones.