A pesar de haber anunciado que prefería retirarse del Abierto de Monterrey antes de enfrentarse con una rival de origen ruso, finalmente, la ucraniana Elina Svitólina (15° de la WTA) saltó a la cancha central del torneo mexicano y, vestida con los colores de la bandera de su país, se impuso categóricamente ante la rusa Anastasia Potapova (115°) por parciales de 6-2 y 6-1.
“Me resulta especial estar jugando este torneo. Esta es una misión por mi país. Siento que no compito por mí misma, sino que por todos mis compatriotas”, expresó la tenista de 27 años tras sellar su pase a octavos de final donde se enfrentará a la búlgara Viktoriya Tomova.
Además de llevarse la mano al corazón tras el contundente triunfo, la ganadora de 16 torneos WTA manifestó que “todo el dinero que gane en premios va a ser destinado para el ejército ucraniano”.
En contraparte, a pedido de la propia Svitólina y bajo la recomendación del Comité Olímpico Internacional, Potapova pisó la pista como ‘atleta neutral’, sin identificarse con símbolos de Rusia y sin la presencia de la bandera de su país, la cual fue retirada por la organización.
Sin duda, el momento que se ganó los aplausos de los aficionados del mundo del tenis fue justo al cierre del encuentro, cuando la ucraniana y la rusa se encontraron de frente en la red y estrecharon su mano.
“No le echo la culpa a ningún deportista ruso. Ellos no son responsables de la invasión de nuestra patria. Lo que estamos pasando es horrible, así que mi misión es unir a la comunidad del tenis para que nos apoyen”, cerró la medallista en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 y esposa de Gaël Monfils.