Luego del polémico episodio racista protagonizado por Nelson Piquet contra Lewis Hamilton, el expiloto brasileño se disculpó públicamente con el británico, pero se justificó argumentando que sus comentarios fueron sacados de contexto y mal traducidos.

Este miércoles, el tricampeón mundial de Fórmula 1, Nelson Piquet, se disculpó con el piloto británico Lewis Hamilton por proferir un comentario racista, aunque alegó haber sido malinterpretado tras una mala traducción.

El brasileño hizo un comentario, en el transcurso de una entrevista televisiva, en la que llamó “neguinho” (negrito) al siete veces campeón del mundo de la máxima categoría del automovilismo, lo que generó una fuerte polémica y una ola de condenas en todo el ámbito de la F1.

“Lo que dije fue desafortunado, y no defiendo eso, pero voy a dejar claro que el término es uno de esos que, desde hace mucho e históricamente, son usados de forma coloquial en portugués brasileño como sinónimo de ‘tipo’ o ‘persona’ y nunca con intención de ofender”, justificó Piquet en un comunicado oficial.

El oriundo de Río de Janeiro subrayó que nunca “usaría” la palabra por la que fue “acusado en algunas traducciones” y afirmó que su objetivo no fue “menospreciar a un piloto debido al color de su piel”.

“Me disculpo con todos los que fueron afectados, incluido Lewis, que es un gran piloto, pero la traducción en algunos medios y que ahora circula en las redes sociales no es correcta”, agregó.

Piquet recalcó que la “discriminación no tiene espacio en la F1 o en la sociedad” y dijo “estar feliz de dejar claro” su opinión sobre dicho asunto.

El comunicado de Piquet se produce un día después de que el piloto de Mercedes reaccionó al comentario del brasileño, el cual consideró “fruto de mentalidades arcaicas”.

“Es más que un idioma. Estas mentalidades arcaicas deben cambiar y no tienen cabida en nuestro deporte. He estado rodeado de estas actitudes toda mi vida. Ha habido mucho tiempo para aprender. Ha llegado el momento de la acción”, escribió en sus redes sociales el británico, quien en los últimos años ha emprendido una lucha contra el racismo.

Las declaraciones de Piquet también fueron condenadas por la FIA, Mercedes, Ferrari y otros equipos de la Fórmula 1, que rechazaron “cualquier uso de lenguaje racista o discriminatorio”. Un repudio generalizado que fue adherido por el propio ente rector del automovilismo mundial, que dio a conocer el castigo de Piquet pese a sus disculpas; decidieron vetarlo del ‘paddock’ (zona de aparcamiento ubicada tras los garajes).