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Tras la fatal colisión entre un avión de American Airlines con un Black Hawk de la fuerza aérea estadounidense en Washington D.C. en las cercanías del Aeropuerto Nacional Ronald Reagan, las autoridades descartaron hallar sobrevivientes de la tragedia.

En el vuelo comercial de la mencionada aerolínea, iban a bordo cuatro tripulantes y 60 pasajeros, entre los cuales, se encontraban patinadores rusos y estadounidenses.

Fue así que en este contexto, se especuló de que el patinador Jon Maravilla zafó de subirse al avión que protagonizó la tragedia al ser “salvado” por su perro, pero tal situación, según aclaró el deportista, no fue tan así.

“Jon Maravilla dijo que el tamaño de su perro fue la razón por la que un agente de la puerta de embarque le negó abordar un vuelo de Delta Air Lines a Atlanta, no a la capital del país“, informó el medio norteamericano Daily Beast.

Inicialmente, consignan, “RIA Novosti informó que a Maravilla le informaron que su perro no podía viajar en un vuelo de Wichita a Washington debido a restricciones de tamaño. Al no poder abordar el avión, el medio informó que partió en automóvil”.

Sin embargo, el patinador desmintió todo, al asegurar que no iba a Washington.

Dijo que iba a tomar un vuelo a Atlanta antes de hacer conexión con un segundo vuelo a Detroit” y que “no sabía de dónde provenían los informes falsos sobre el abordaje de un vuelo a Washington, pero dijo que estaba devastado por el destino de sus amigos”, afirma el citado medio.

Finalmente, John Maravilla optó a viajar por tierra y de hecho, se enteró del accidente cuando recibió mensajes, en los cuales, le consultaron si él era parte del accidentado vuelo.