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En un emocionante encuentro, un gol de Marin Sipic en el último segundo del partido llevó a Croacia a las semifinales del Mundial de Balonmano al vencer a Hungría 31-30, a pesar de estar en desventaja apenas cinco minutos antes. Los magiares, dirigidos por Chema Rodríguez, llegaron a tener una ventaja de cuatro goles, pero la selección anfitriona logró igualar el marcador en el minuto final y con el tanto de Sipic selló la remontada. Zvonimir Srna fue elegido el mejor jugador del partido por su contribución con 5 goles, mientras que Zoran Ilic fue destacado en Hungría con ocho anotaciones. Croacia celebró efusivamente su pase a las semifinales, donde se enfrentarán al ganador entre Francia y Egipto.
Un gol de Marin Sipic en el último segundo del encuentro ante Hungría (31-30) situó a Croacia en las semifinales del Mundial de Balonmano, de las que estaba fuera apenas cinco minutos antes.
En el primer encuentro de los cuartos de final jugado en Zagreb, los magiares, dirigidos por el español Chema Rodríguez, llegaron a disfrutar de cuatro goles de ventaja en el primer tiempo y también en la segunda parte, a falta de pocos minutos para la conclusión.
Pero la selección anfitriona, que había eliminado este domingo a Eslovenia (29-26) para obtener el último pasaje a esta fase, remontó la desventaja en las postrimerías del choque para situar la igualdad a 30 en el minuto final.
El público local creyó en que la remontada era posible. Y tanto que lo fue: cuando todo parecía abocado a una prórroga, un gol de Sipic, quien terminó con cinco tantos, completó el sueño.
Después de eso, todos los jugadores croatas terminaron abrazados y tirados en el centro de la pista celebrando el pase a las semifinales en las que se medirán al ganador del duelo entre Francia, séxtuple campeona del mundo, y Egipto, que dirige el español Juan Carlos Pastor.
Zvonimir Srna fue elegido el mejor jugador del partido, gracias a los 5 goles anotados en el encuentro.
Por los perdedores, Zoran Ilic -de origen serbio- fue el hombre más destacado en Hungría, con ocho anotaciones.
¡Del 26-30 al 31-30!
La grada de Zagreb, un ambiente infernal y el no bajar los brazos hasta que pita el árbitro