"Tengo las manos llenas de sangre": el día en que atleta fue impactado y ensartado por una jabalina

El 2024 quedará en la memoria de todos los hinchas del deporte en general al rededor del mundo, luego de la realización de los Juegos Olímpicos de París y los Juegos Paralímpicos en la capital francesa.

La cita de los 5 anillos reúne una gran cantidad de deportes que muchas veces no están al alcance de todos, tanto deportistas como hinchas que buscan ver disciplinas desplazadas por el fútbol, tenis, básquetbol y muchas otras.

Por ejemplo, en los JJOO, el atletismo tiene una gran visibilidad, siendo uno de los deportes insignia con todas sus disciplinas.

Entre ellas se encuentran deportes como la jabalina y salto largo, dos disciplinas que convergen de una manera insólita en esta historia.

Era el año 2007 cuando se celebró la Golden League (serie anual de reuniones atléticas) en Roma, evento en donde el atleta francés Salim Sdiri, se convirtió en protagonista de una insólito y terrible momento que pudo terminar en tragedia.

En plena competición, el francés que en ese entonces era especialista en el Salto Largo, estaba terminando su presentación cuando por la espalda, una jabalina de 800 gramos se le incrustó en un costado de su espalda, dejando atónitos a todos los rivales y competidores que estaban cercanos a él.

¿Quien lanzó la jabalina? Uno de los expertos y referentes del mencionado deporte en esos años, atleta finlandés Tero Pitkämäki, quien disputaba la disciplina a más de 80 metros de distancia de Sdiri.

Resulta que el finlandés lanzó tan desviada su jabalina que está se incrustó en la humanidad del francés cuando terminaba su participación, cayendo al suelo y siendo socorrido en primera instancia por el saltador italiano Andrew Howe.

“Tengo las manos llenas de sangre”

El ganador de la prueba de la longitud detalló a L’Equipe en ese entonces que “yo estaba a un metro de Salim, que tenía la jabalina clavada. Se la arranqué y todavía tengo las manos llenas de sangre”.

La imagen fue terrible. El atleta herido fue atendido en la pista. Pitkämäki, el lanzador, se puso las manos a la cabeza. Inmediatamente llegó una ambulancia y trasladó al herido al Policlínico Gemelli en Italia.

Fue ahí mismo donde el italiano vencedor, Howe, tranquilizó a la gente: “Me ha dicho ‘no te preocupes, Andrew, estoy bien”.

Ya en el hospital, se logró detectar que la jabalina de 800 gramos atravesó su espalda y perforó 7 centímetros, aunque afortunadamente, no daño ningún órgano vital de Salim Sdiri.

Dicho incidente recorrió la vuelta al mundo en ese año y las declaraciones de Sdiri tras salir del hospital fueron un fiel reflejo de la poca seguridad en este tipo de eventos.

“¿Esperan a que haya un muerto?”

En conversación con L’Equipe, el protagonista de esta historia detalló que “¿A qué esperan? ¿A que haya un muerto?. Pienso que podría haber sido más grave”.

Los días posteriores al salir del hospital, Salim confesó sentir un dolor agudo en la parte donde ingresó la jabalina, pero no reaccionó mal contra el finlandés que lo hirió, sino que sus arremetidas fueron para la organización de la Golden League.

“No es culpa suya. Él hacía su trabajo (…), no me alcanzó adrede. Pero estoy enfadado contra el sistema y la reglamentación”, confesó.

Así también, recordó que 4 años antes, en 2003, un martillo aterrizó en la pista donde se disputaban los 100 metros, pero afortunadamente no hubo lesionados.

Con este tipo de eventos, la Golden League estuvo en el ojo de la tormenta por varios años más hasta su última versión celebrada en 2009.

No obstante, este dramático episodio marcó la pauta para los eventos que continuaron como los Juegos Olímpicos.

Basta con ver y/o recordar como se disputó esta versión en París 2024, donde el gigantesco Stade de France, se convirtió en epicentro del atletismo olímpico en donde sus largas distancias y sus buenas ubicaciones para las competencias evitaron problemas como el de Salim Sdiri.

Revisa el video el brutal accidente de Salim Sdiri