A menos de una semana para el esperado inicio de los Juegos Olímpicos de París 2024, tanto los franceses como las delegaciones de todos los países se preparan para abrir el telón de esta cita internacional, en una ceremonia inaugural que se llevará a cabo a lo largo del río Sena de manera gratuita, siendo la primera vez en la historia que la apertura no será dentro de un estadio.
Pese a la expectación por las Olimpiadas, en Francia existe un clima de dulce y agraz, ya que las polémicas suscitadas en la antesala de este evento -como las protestas contra el presidente Emmanuel Macron y sus políticas migratorias, la molestia por no excluir a Israel de la competición o las muertes de trabajadores que dejaron las obras- mantiene un ambiente tenso que no se condice con el mega-espectáculo que se lleva preparando hace meses, donde se pretende mostrar al mundo la cultura, historia y grandeza de este país, con un show que durará más de tres horas.
Al aire libre, gratuito y a lo largo del Río Sena
Con la promesa de “un espectáculo enorme y nunca antes visto” y de “una narración plural de Francia en 360°” (en palabras de Thomas Joly, director artístico de la ceremonia de apertura), la anhelada inauguración de los JJ.OO. está programada para este viernes 26 de julio en el popular río Sena y que tendrá una duración de tres horas y 45 minutos, apuntándose como uno de los shows con la mayor cobertura televisiva en directo de la historia, según lo señalado por el propio Comité Olímpico Internacional (COI).
A diferencia de todas las anteriores ceremonias realizadas dentro de un recinto deportivo, las distintas delegaciones de deportistas desfilarán durante seis kilómetros, pero esta vez, lo harán a bordo de 85 embarcaciones que cruzarán este río que atraviesa por los lugares más típicos de París. Cabe consignar que no se ha revelado el número de atletas que viajarán en cada uno de estos barcos, aunque de seguro veremos a Nicolás Jarry y Antonia Abraham (los abanderados chilenos) en uno de ellos.
El desfile fluvial comenzará desde el puente Austerlitz y concluirá en el Tocadero, en un acto al aire libre donde el público tendrá la posibilidad de ver este show de manera gratuita y de pie, aunque no habrá ningún lugar asignado ni reserva.
“Podemos esperar cosas enormes y nuevas. En términos de emoción, se ha establecido una verdadera narrativa. Un proyecto a la francesa, que queremos que sea chic y lleno de cualidades muy intensas”, sostuvieron desde la organización.
Pero, ¿por qué se decidió realizar la apertura en el Sena? De acuerdo al COI, el principal objetivo no sólo es no darle la espalda al río más emblemático de París, sino que sacar el deporte a la ciudad y trasladar la fiesta al corazón de la ciudad, entendiendo al deporte como pasión de muchos y no sólo de unos pocos que tienen los recursos para pagar su entrada.
Desde este jueves, las autoridades parisinas tomaron la decisión de cerrar el perímetro por donde desfilarán los artistas. Una determinación que los habitantes de los lugares aledaños, e incluso los turistas, no compartieron, poniéndose de acuerdo en que dicha medida era una exageración y generando la molestia de la población, a días del arranque de los JJ.OO.
Desfile fluvial, 3.000 bailarines y homenaje a Notre Dame: un show de más de tres horas
En distintos puntos principales en las orillas del río Sena, los artistas que participarán en la ceremonia inaugural se conformarán en doce grupos diferentes, donde cerca de 3.000 bailarines y actores serán los encargados de interpretar y relatar la historia de Francia. En ese sentido, el objetivo de este espectáculo es combinar la danza contemporánea con la urbana, defendiendo la inclusión y diversidad a través de diferentes estilos, proponiendo unos Juegos Olímpicos rupturistas.
La transmisión de este espectáculo no se queda atrás. Y es que, dentro en las embarcaciones donde viajarán los deportistas habrán más de 200 smartphones que permitirá al espectador disfrutar de este desfile con múltiples perspectivas, ya que no sólo se podrá vivir este acto desde el punto de vista de los atletas, sino que también se trabajará a la par con diez drones, tres helicópteros y cuatro barcos exclusivos para camarógrafos, técnicos y productores.
Según cifras del Servicio Olímpico de Difusión, se utilizarán tres veces el número de cámaras (y otros recursos audiovisuales) que en la anterior apertura de los Juegos Olímpicos de Tokio 2020.
“Es un espectáculo para la televisión y también para los que estarán en el muelle. Habrá pantallas para mostrar los pasajes filmados en los monumentos, ya sea en vivo como grabados con anterioridad”, detallan desde la organización.
Otro aspecto a considerar es la propuesta de vestuario, a cargo de la diseñadora Daphné Burki, quien promete diseños únicos e irrepetibles que saben responder a los riesgos que significa un show al aire libre, adecuando los trajes de los artistas, quienes necesitan más libertad para sus movimientos y poniéndose en el caso de cualquier cambio climático, como la lluvia. El recorrido del desfile fluvial contará también con paradas y enfoques en los principales monumentos situados en los alrededores del Sena, como el museo de Louvre, la torre Eiffel y la catedral de Notre Dame, esta última contará con un homenaje especial para celebrar su reapertura a fin de año.
La hora prevista del inicio de la ceremonia es a las 19:30 horas de Francia (11:30 horas en Chile) para comenzar este espectáculo con luz de sol, ver el atardecer durante el desfile y finalizar con la tradicional llama olímpica con la oscuridad de la noche, a eso de las 23:00 horas.
Es importante consignar que, en nuestro país, la apertura de los JJ.OO. se podrá ver en la señal abierta de Chilevisión y en sus respectivas plataformas digitales. Por otra parte, si bien la inauguración de esta cita es el 26 de julio, las competiciones como fútbol y rugby, comenzarán a disputarse desde el 24 de julio.
Protestas y contaminación del Río Sena: las polémicas
Sin embargo, no todo ha sido color de rosa para los organizadores de las Olimpiadas ni para las autoridades francesas y parisinas. Y es que, hace unas semanas, un grupo de trabajadores contratados para preparar los Juegos Olímpicos destaparon una verdadera olla a presión, haciéndole ver al mundo (con protestas y huelgas) las peligrosas condiciones labores a las que fueron sometidos, que derivaron en accidentes y muertes. Una profunda molestia a la que se le sumó la búsqueda de mejorar los salarios, los cuales aún no han sido pagados en su totalidad, sobre todo a inmigrantes ilegales, acusaron voces internas del sindicato.
Y no sólo eso, ya que la indignación de la población francesa ante la gestión de la cita deportiva hizo surgir un curioso movimiento en redes sociales, que pone en duda la sanidad y el estado bacteriológico del río Sena (donde se llevará a cabo la apertura y distintas pruebas deportivas). Para derribar estas acusaciones, la alcaldesa de París, Anne Hidalgo, el presidente del comité organizador de los Juegos Olímpicos, Tony Estanguet, y el prefecto de la región Isla de Francia, Marc Guillaume, se bañaron el pasado miércoles en el río, en un acto simbólico que puso fin a una inversión aproximada de 1.400 millones de dólares, que tuvo como misión sanear el Sena, donde los parisinos tienen prohibido bañarse desde hace un siglo debido a la navegación fluvial y la contaminación.
Pese a este acto político, un grupo de franceses en redes sociales han hecho un llamado a aguarle la fiesta de las Olimpiadas, no sólo por esta limpieza de imagen, sino que también debido al descontento político que ha provocado la extrema derecha en los últimos meses. El crecimiento económico de un 0,1% que significará esta cita internacional no es suficiente para este movimiento y, con el hashtag #JeChieDansLaSeineLe23Juin, invitan a los lugareños y turistas a defecar en el río, incluso, crearon un sitio web con el mismo nombre que sirve para calcular a qué hora depositar las heces para que llegue a tiempo, según la distancia a la que se encuentren de la capital.
El temor por un posible boicot en plena ceremonia inaugural es un secreto a voces en Francia. De momento, no existe ninguna información oficial sobre algún acto de protesta que planee un grupo extremista. El triunfo de la coalición de izquierda Nuevo Frente Popular en la segunda vuelta de las elecciones parlamentarias en Francia no fue suficiente para apaciguar el clima polarizado y hostil que se vive en el país europeo -que atraviesa una profunda crisis política-, además, la reelección de la macronista Yaël Braun-Pivet como presidenta de la Asamblea Nacional, no ha ayudado a superar este ambiente.
Una organización de París 2024 que ya ha sufrido actos de protestas hace unos meses, como el protagonizado por adherentes al movimiento palestino, que exigieron explicaciones a los altos mandos y la exclusión de Israel de los JJ.OO. por los crímenes contra Palestina en su guerra contra Hamás. Un enojo que se hizo presente en las puertas de las oficinas del comité olímpico parisino.