El Gobierno francés oficializó este martes vuelos experimentales de taxis aéreos durante los Juegos Olímpicos de París, que comenzarán el 26 de julio y terminarán el 11 de agosto, una iniciativa que puede paralizar en la Justicia el Ayuntamiento capitalino.
Fabricados por la empresa alemana Volocopter, que fabrica el modelo ‘Volocity’, las aeronaves a propulsión eléctrica cuentan con dos plazas -una de ellas para al conductor- y, durante los Juegos, recorrerán, de forma experimental, tres líneas en París y sus alrededores.
De momento, se sabe que una de ellas irá desde una barcaza instalada en el Sena junto a la estación de Austerlitz (sureste) hasta el helipuerto de Issy-les-Moulineaux (suroeste).
A pesar del aval del Ejecutivo francés, que oficializó la decisión en el boletín oficial del Estado, estos vuelos no cuentan con el visto bueno de la Agencia Europea de Seguridad Aérea (AESA) para poder funcionar normalmente, por lo que lo harán solo de manera experimental, entre las 8 y las 17 horas.
Por este motivo, los aerotaxis no podrán cobrar por sus servicios de momento. Se estima que un vuelo en un aparto así puede oscilar entre los 105 y 140 euros
No obstante, el Ayuntamiento de París considera esta iniciativa “una aberración ecológica” y sopesa acudir a los tribunales para paralizarla.
“Este gobierno no tiene legitimidad de ir en contra de lo que se ha decidido en el pleno del Ayuntamiento”, declaró en France Bleu el concejal de movilidad, David Belliard, en alusión a la oposición a este proyecto mostrada por la alcaldía.