La Selección de Chile perdió 26-38 ante su símil de Túnez en la final de la Copa Presidentes del Mundial de Balonmano, mini torneo que enfrentó a los combinados que no accedieron a la lucha por el título planetario.
El combinado nacional llegó al decisivo duelo tras vencer a Arabia Saudita, Uruguay y Corea del Sur, pero poco pudo hacer un sólido elenco africado que tuvo un primer tiempo aplastante.
El duelo comenzó con los rápidos ataques del equipo tunecino, que llegó a ponerse dos goles arriba mientras los dirigidos por Aitor Etxaburu se acomodaban en la cancha.
Sin poder hacerlo, el combinado africano aprovechó cada contragolpe y las dudas chilenas en ataque para llegar a estar 9-2 en el marcador. A lo anterior, se sumó el buen partido del portero Asil Namli.
Túnez no bajó el ritmo y anuló por completo a Chile, al punto de extender su distancia a 12-3 en solo 18 minutos de partido.
Por si lo anterior fuera poco, la distancia llegó a ser de 11 goles a favor de los africanos, con un demoledor 18-7 en apenas 24 minutos de juego. La primera mitad, por suerte, acabó 24-10.
La segunda media hora inició con un Chile más sólido, que logró reducir mínimamente la ventaja en los primeros minutos gracias al goleador Erwin Feuchtmann.
La Roja logró acortar la distancia a 9 goles, aprovechando las rotaciones de Túnez y los ajustes en la delantera que se tradujeron en goles para el combinado nacional.
Lamentablemente, el marcador no pudo achicarse mucho más. Túnez acabó llevándose el partido por 26-38 y ganó la Copa Presidentes del Mundial de Balonmano.
Con el resultado, Chile acabó en el puesto 26º y mejoró su última actuación, donde fue 27º en el torneo jugador en Egipto.