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El incansable vuelo del ’Ardilla’: los 8.000 saltos de Sebastián Álvarez y su sueño de correr Rally

Por Pablo Velozo
La información es de Javier Zamorano

07 septiembre 2020 | 13:46

Cuando Sebastián Álvarez era un pequeño siempre que pasaba un avión por sobre su cabeza quedaba paralizado y se limitaba a observar. Así fue toda su niñez en Viña del Mar. Avión que pasaba y él se detenía a mirar.

Probablemente no lo sabía, pero Sebastián daba de esa manera inocente sus primeros pasos a la actividad que se transformaría en la gran pasión de su vida y su profesión: el volar.

Con el paso de los años, el ‘Ardilla’, como era conocido, no pensaba en otra cosa más que en estar en el aire. Esa determinación lo llevó a formar parte de la Fuerza Aérea nacional, lugar donde se enamoraría aún más de su deseo de niño.

En la FACH Álvarez conoció el paracaidismo y se acabaron las pocas dudas que quedaban en su vida: “A esto me quiero dedicar”, pensó. Poco después de salir lo concretó, transformándose en el gran exponente nacional de la disciplina, ganando, inclusive, reconocimiento en el extranjero.

Ya consolidado, Sebastián, deportista de RedBull, decidió radicarse en Estados Unidos. Así puede entrenar mejor y ser parte del tour que incluye fechas precisamente en Norteamérica y Europa, donde compite con los mejores del mundo y siempre logra sobresalir.

Actualmente en California, el paracaidista se dio un tiempo para atender a BioBioChile para hablar de su carrera, desde sus inicios como aficionado hasta sus grandes proyectos que quedaron grabados en la historia, como la vez que pasó entre medio de las ‘Torres de Gemelas’ de Viña del Mar o cuando rodeó el Costanera Center en Santiago. Esta es la historia del ‘Ardilla’.

RedBull / Sebastián Álvarez

“Las competencias se pararon por el virus”

¿Cómo te afectó el tema del covid-19, Sebastián? ¿Estabas en Chile cuando se desató la pandemia?

Cuando llegó el covid estaba en Chile y nada, lo viví como cualquier otro chileno. Yo soy de Viña y ha ido creciendo, así que fui testigo como de a poco fue llegando el virus allá y Valparaíso. Ya en mayo me vine a California, porque acá es donde entreno, y me quedé. Lo he seguido por las noticias, y voy viendo cómo va la cosa.

¿Has tenido algún inconveniente para entrenar en Estados Unidos?

No, en realidad no. Acá, como en todos lados, toman las precauciones necesarias, pero son mas abiertos al tema de seguir trabajando, estudiando, viviendo, entrenando, haciendo deportes. La mentalidad acá en ese caso es un poco diferente a la de allá, el llamado acá es a seguir la vida, con los cuidados correspondientes. No hay cuarentena de encierro como en Chile, pero sí se toman medidas de precaución.

Suponemos que esto igual debe haber afectado tu calendario deportivo

En cuanto a competencias está todo parado por el virus, pero en cuanto a proyectos es donde más me estoy enfocando y precisamente ahora me estoy entrenado para realizar un par de proyectos que tengo en Chile para el verano, si todo vuelve a una relativa normalidad

Antes de que se desatara la pandemia ¿Tenías alguna competencia cerca para la que te preparabas?

Siempre están las competencias que hacemos, un tour que hay básicamente en Estados Unidos, Europa y que, paradójicamente, termina en China. Pero está todo cancelado. Al menos he tenido tiempo para enfocarme en proyectos personales, siempre relacionado al deporte

Cedida

“Quiero volvar en el sur y norte de Chile”: Patagonia y Desierto en el horizonte

¿Qué tipo de proyectos estás preparando? Relacionado a lo audiovisual, imaginamos, por lo espectacular de los saltos

Sí, siempre. Son proyectos audiovisuales que nacen básicamente de ideas mías que vamos puliendo de a poco y terminan en grandes proyectos, si es que se pueden hacer. Siempre idealmente en Chile, pero también tengo contemplados en Estados Unidos y Europa.

¿Algún detalle que nos puedan contar de esos planes?

Son sorpresas (risas). Sí puedo contar que quiere volar en el sur y norte de Chile. Pero como no está cien por ciento seguro no puedo contar mucho. Pero está ligado a la Patagonia, en el sur, y al desierto, en el norte.

Tienes muchos proyectos, has cumplido muchos más. Pero ¿Hay algún lugar desde donde sueñes saltar?

La verdad que mi idea, no sé si sueño, es volver a mostrar a Chile desde el aire a diferentes lugares. Lo hermoso que tiene Chile es su geografía tan cambiante de norte hasta sur. Son esos colores, en el norte súper áridos, también en Viña donde hay mar con cerros, y obviamente la Patagonia también llama la atención por los accidentes geográficos que tiene, el clima, los vientos, la intensidad… hay que buscar un buen día para poder volar y hacer un lindo vuelo.

¿Cuál es el salto que has hecho que más te ha gustado o destacarías?

La verdad que tengo varios, pero obviamente hubo proyectos muy interesantes como pasar por entre medio de las Torres Gemelas de Reñaca, o el vuelo sobre el Manquehue donde pusimos un objetivo para demostrar lo preciso que podía ser volando a 250 kilómetros por hora. También cuando bordeamos el Costanera en Santiago. Han sido proyectos muy interesantes para mí, porque combino a Chile con el deporte, para poder mostrarlo al mundo’

De los tres ¿Hay alguno que pongas por sobre el resto?

No, para mi todos tienen una relevancia importante… No sé, puede haber alguno más complicado que otro, pero todos han sido muy interesante. ¿Cuál es el más espectacular? Eso se lo dejaría a la gente. Sí tengo lugares favoritos para saltar.

¿Y cuáles serían esos? ¿Alguno de Chile?

Uno es Pucón, que tiene una vista que no se encuentra en otro lugar en el mundo, con el volcán activo al lado. Después Suiza me parece hermoso y Hawái. Esos tres lugares me han llamado la atención mucho, básicamente por la visual que uno logra tener, y por la buena onda de la gente también.

Sebastian Álvarez

“No me veo en otra cosa más que volando

¿Cuánto te llevó decir ‘Yo quiero volar’? ¿En qué momento pensaste ‘me quiero dedicar a esto’?

En realidad me parece que ni siquiera me acuerdo. Yo pienso que desde niño siempre quise volar, o por lo menos siempre me sentí súper atraído al vuelo en general. Eso me llevó a ser piloto cuando era más joven, me llevó a estudiar esa profesión y de a poco conocí el paracaidismo. Así me fui enamorando de todos los deportes ligados a la aviación.

¿Y hasta cuando piensas mantenerte activo?

El otro día me hacía la misma pregunta y me decía si iba a seguir volando, en qué iba a pasar con mi vida, y no me veo en otra cosa más que volando, incluso cuando sea viejito.

¿Cómo descubres el Wingsuit? La disciplina a la que te dedicas ahora

Yo estudié en la fuerza aérea y de ahí, por decir, conocí este mundo de la aviación impresionante, lindo y técnico. En la fuerza aérea aprendí a hacer paracaidismo militar y me gustó mucho. Entonces hice el curso de paracaidismo deportivo ‘por afuera’. Después cuando me retiré de la fuerza aérea ya tenía más o menos claro que me iba a dedicar al paracaidismo, así que me vine básicamente a entrenar al extranjero. Y eso siempre ha sido en California o Florida.

¿Y alguien te habló del Wingsuit? ¿Cómo llegas a él?

En realidad una vez estando acá en Estados Unidos, que las facilidades en todas las cosas son más grandes, conocí a muchos amigos que practicaban este deporte y uno de esos me ayudó a volar. De ahí en adelante fue todo pura pasión e ir creciendo, volando más, probando nuevos trajes, volando en diferentes lugares y agarrando experiencia.

¿Crees que tiene que tener algo de locura la gente en deportes extremos?

En realidad no lo veo tan así. A mí me cuesta entender a personas que pasan toda la vida en una oficina y me parecen locos también. Son diferentes puntos de vistas no más.

Pero alguna característica especial deben tener…

Sí, obviamente lo primero es la pasión. Si a uno le gusta las cosas que hace de ahí en adelante empieza a funcionar. Entonces si a alguien le gusta trabajar en oficina o le gusta trabajar en otro lado, y es apasionado, en algún momento va a lograr ser uno de los mejores del mundo, o esa pasión lo va a llevar a ser un profesional ejemplar.

Redbull / Sebastian Alvarez (CHI)

“Siento algo de miedo cuando salto, pero es bueno”

¿Qué te dicen tus cercanos cuando te ven haciendo esos saltos? ¿O qué comentan quiénes te siguen habitualmente?

En realidad pura buena onda. Mucha buena onda. Me felicitan y hay gente que se ha sentido motivada por mí, y lo va conociendo al paracaidismo, y después terminamos saltando juntos.

Qué importante eso. Trascender…

Sí, me imagino que es motivante para la gente ver a alguien que puede vivir de su pasión, debe ser algo motivante en cualquier orden de cosas.

¿Qué se siente cuando vas cayendo o volando a 250 kilómetros por hora como nos comentabas?

Lo puedo explicar. Es una combinación de adrenalina con concentración que es, tal vez, lo que he andado buscando toda mi vida. En cierta parte es muy parecido a lo que viven los pilotos cuando están en las cabinas y están cien por ciento enfocados en su trabajo, en hacer el vuelo bien. En mi caso es una combinación de mil por ciento de concentración con esa adrenalina, y los conocimientos que uno ha ido adquiriendo en su carrera. Es algo único y especial.

¿Sientes algo de miedo?

Si, obvio. Saltar de un avión, helicóptero o montaña no es algo natural para el hombre. Estamos hechos para caminar con dos piernas, con tener las patas en la tierra y estar ahí. Pero saltar no es nada natural y en realidad es bueno que uno sienta miedo.

¿Cómo lo haces entonces?

Es que mientras uno lo transforme el miedo en algo positivo es súper bueno, porque a uno lo hace estar más atento. Me sorprendería más no tener miedo que tener un poquito miedo. No es que yo me muera de miedo, pero sí uno siente esa adrenalina que a uno lo hace estar atento al cien por ciento.

¿Recuerdas alguna anécdota especial de alguno de tus saltos?

Lo especial es que estoy llegando casi a los 8 mil saltos. Cada cual los trato de guardar en lo más posible dentro de mi recuerdo, a pesar de que alguno se me olvida. Pero cada salto es como surfear una ola, no hay una la igual que la otra. En saltos es lo mismo. Uno lo comparte con amigos, se enfoca en entrenar, en diferentes cosas, pero sí los trato de guardar todos bien en el corazón.

Otros Deportes: el gusto por el surf y sueño del automovilismo

¿Probaste alguna vez con otro tipo de deportes?

Sí, como buen viñamarino me gusta mucho el mar y desde niño, y antes del paracaidismo, soy muy aficionado al surf. Lo sigo practicando hasta el día de hoy. Es un deporte complementario, me sirve mucho, es para conectarse nuevamente con la naturaleza, con el mar, y mantener el cuerpo y alma en buen estado.

¿Igual lo practicas en Estados Unidos?

Sí, acá lo hago y en realidad a donde pueda lo practico. En Chile tengo mis tablitas, tengo mi traje, mis cosas, entonces cuando voy los verano allá surfeo mucho, lo que más pueda. Y acá también. El tema es que claro, también ando siempre con mucho equipo de paracaidismo, entonces no puedo viajar con las tablas, pero cada vez que voy al mar uno siempre encuentra amigos que te prestan implementos y uno puede distraerse. El surf es un deporte muy activo, que te mantiene el cuerpo demasiado en forma y sirve mucho para volar.

¿Algún deporte que no practicaste tanto y te hubiese gustado tener una aventura?

No, la verdad que con estos dos deportes ya estoy bien por toda mi vida. Soy también muy aficionado del rugby. Lo jugué cuando chico, pero me gusta mucho verlo. Encuentro que es un deporte que tiene mucha disciplina y enseña mucho, a diferencia de otros deportes que cero disciplina.

¿Tienes algún ídolo del deporte? ¿Alguien que quizás te haya inspirado?

Tengo muchísimos. Que se me venga a la mente ahora Kelly Slater del surf, 11 o 12 veces campeón mundial, un atleta excepcional mental y físicamente. Hay varios atletas del paracaidismo que han hecho de mí un mejor atleta, gracias a mirarlos y ver cómo han sido sus vida, han sido un camino para poder seguir. Los pilotos de Fórmula 1 me gustan mucho, por su actitud competitiva y la concentración

¿Y algún deportista chileno?

Bueno, el ‘Chaleco’ López. Ha hecho una carrera impresionante y también vive mucho la pasión.

¿Te gustaría a lo mejor probar con el deporte motor?

Me encantaría. De hecho el rally me llama muchísimo la atención. Nunca he tenido la oportunidad de estar en auto de rally, pero estoy seguro que en algún momento voy a estar.

¿Prefieres competencia tipo Dakar o WRC?

Más de velocidad. No creo que podría aguantar un Dakar ahora, sin entrenamiento. Pero que me den una vueltecita en rally sería genial.