Carolina ‘krespita’ Rodríguez está trabajando duro para volver a recuperar el título de campeona mundial de peso gallo.
Actualmente la nacional es campeona en receso, pues la llegada de Megan (su hija) hizo que dejara de lado el boxeo. Pero su rol de madre no es impedimento para que ‘krespita’ esté lista y dispuesta para volver con todo.
Sin embargo, la boxeadora tiene que librar una importante batalla fuera del ring.
La falta de apoyo económico le ha impedido poder organizar más combates por el título mundial. Carolina ha golpeado innumerables puertas, pero la respuesta es la misma de siempre: “no hay plata”.
Pese a esto, nuestra campeona continúa esperanzada de volver con todo al ring y recuperar su cinturón frente a todo Chile.
A continuación, su entrevista con BioBioChile.
¿En qué estás ahora? ¿A qué te estás dedicando en estos momentos?
“Ahora estoy con gimnasio y con las clases, hacemos boxeo y Kickboxing. También estoy preparándome para el torneo WGP de kickboxing, será en octubre acá en Chile. Me iré a Argentina a prepararme por dos meses”.
¿Cuándo volverás a disputar el título mundial?
“Yo tengo todas las ganas, pero siempre cuesta conseguir los auspicios, es lo mismo de siempre”.
“Por ejemplo: para poder hacer los combates, en su oportunidad me reuní con la ministra del Deporte y fui a la cámara de diputados. Pero me dicen que no hay plata, un montón de cosas. Siempre me ponen trabas y me termino desgastando”.
¿Te han llegado ofertas de combates?
“Me propusieron irme afuera, a Estados Unidos, pero tengo a mi hija. Ahora no puedo perder los años con ella.
¿Cómo ha sido el tema del apoyo económico? ¿Las autoridades se la han jugado por ayudarte a financiar tus peleas?
“Creo que de alguna u otra forma no le dan importancia, en general las autoridades, a lo que sirve tener un título mundial. Les guste o no les guste el boxeo creció gracias a las transmisiones de mis títulos. Ahí empezó a crecer en la parte comercial, porque ahora muchos gimnasios y profesores pueden vivir haciendo clases, algo que antes no sucedía. Además, muchos chicos se hicieron profesionales. Creció mucho la parte amateur”.
Eres sin duda la boxeadora más importante que tiene Chile ahora, ¿Te parece que se te ha dejado de lado?
“No le toman la relevancia de volver a recuperar un título mundial. En mi caso, en el boxeo, lo que he ganado lo he hecho porque soy buena y no porque me lo regalaron. No he perdido ninguna pelea. Me da lata que en otros países me valoren mucho más que acá. Allá me ofrecen entrenamiento gratis y acá cero importancia. Me dicen que no hay plata. Yo no pido para mí, sino para poder realizar los combates”.
“La única excusa que me ponen es que es muy caro un título del mundo, pero no puedes esperar que un título mundial sea igual de barato que hacer una pelea comercial. Me dicen que es demasiado caro, pero estás trayendo todo el circo a Chile”.
La llegada de Megan, tu hija, te cambió la vida, ¿Cómo ha sido tu experiencia con la maternidad?
“Para mí linda. Decía: ‘tengo mi guagua, espero con suerte un mes y me pongo a entrenar’. Pero nació ella y me di cuenta que era una persona que dependía de mí. Pasó a ser más importante ella que mi carrera deportiva. Pero también es mi sueño ser la mejor y estoy consiguiendo los recursos para volver de una u otra manera.
Ha sido un aprendizaje, aprendí a disfrutar de lo simple, estaba muy obsesionada con el tema deportivo. Ella me enseñó a disfrutar otra vez un montón de cosas tan básicas como sentarse en el piso y jugar. Ha sido súper rico.
¿Es difícil compatibilizar el hecho de ser madre con el boxeo?
“Muchísimo. El deporte es tu trabajo y tienes que dormir bien, entrenar y después descansar, comer saludable. Mi hija es mala para dormir y despierto dos o tres veces en la noche y ya no estás recuperando tu cuerpo. Entonces tienes que ponerle más cabeza al asunto”.