El pasado 22 de marzo marcó un antes y un después para Miguel ‘Aguja’ González. El boxeador nacional, campeón latino de peso Súper Mosca de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB), esa noche cayó noqueado ante el australiano Andrew ‘Monster’ Moloney. Una derrota, sin dudas, muy dolorosa.
Muy dolorosa debido a la forma en que perdió, a que la pelea ocurrió en nuestro país y que, con esa victoria, Moloney le arrebató la chance para ir en búsqueda del título mundial Súper Mosca.
Pero el combate fue parejo. La lucha comenzó de menos a más, con un Moloney arrasando en los primeros asaltos a un González que entró muy nervioso al ring del Arena Monticello.
Las ansias del ‘Aguja’ se reflejaban en cada golpe errático, en cada combinación propinada por ‘Monster’ y en cada round que consumía tiempo en contra del chileno. Los tres asaltos iniciales fueron una demostración del poder que ostentaba el australiano, y que lo situaba como el tercer mejor boxeador de su categoría.
Pero, luego de la tercera manga, el nacional logró dejar atrás sus nervios y empezó a conectar varios golpes a su contrincante. La efectividad de González subió a altos niveles de efectividad, al igual que la sorpresa de Moloney quien no encontraba respuesta a la defensa y movimientos del boxeador de 29 años.
“Moloney es un gran peleador. Íbamos muy parejos, pero yo iba ganando, por poco, pero ganando. Pero muchas cosas empezaron a pasar por mi cabeza”, recuerda González sobre esa noche, en conversación con BioBioChile.
En el sexto asalto el ‘Aguja’ logró conectar una buena combinación al abdomen de su rival, ‘Monster’ trastabilló y cayó un par de segundos a la lona. El público se levantó de sus asientos, festejando, pero lo mismo hizo el australiano, quien aún tenía pelea para dar.
Era el mejor momento de Miguel en la lucha, pero algo pasó, algo que él dice saber pero en lo que prefiere no profundizar y dar vuelta la página. Ocurrió en el octavo round, y terminaría definiendo la pelea.
Fueron dos zurdazos, uno al cuerpo y otro al rostro, los que conectó Moloney y tumbaron a González. A duras penas el chileno se repuso, pero no estaba en condiciones de seguir. La jueza ordenó el toque de la campana: victoria para ‘Monster’, la 19 de su carrera; y derrota para el chileno, la segunda en su historial de 31 peleas.
“La pelea la perdí yo, no la perdió mi esquina ni me la ganó Moloney, yo la regalé. Me empecé a calentar por otras cosas y me fui de la pelea. Siempre he sido así, muy calentón, me salgo de las cosas. ‘Monster’ es un rival pegador, justo se dio el tiempo y cayó el golpe”, sostiene Miguel.
Levantarse tras una terrible caída
Van a cumplirse dos meses de esa fatídica noche del 22 de marzo, y González recién está volviendo a los entrenamientos. Asegura que se encerró una semana y debió pasar un mes sin entrenar, tomándose unas ‘vacaciones obligadas’.
“La pelea con Moloney no la he visto, me han mostrado algunas cosas, notas, portadas, pero no el combate. No me gusto mucho, no veo mis peleas, ni siquiera me gusta escuchar mi voz. Sé los errores que cometí y prefiero dar vuelta la página”, comenta el ‘Aguja’.
Tras perder ante ‘Monster’, González empieza un largo camino. Sigue como campeón latino de peso Súper Mosca y, por normativa de la AMB, debe defenderlo al menos una vez al año. Pero perdió su oportunidad de aspirar al título mundial y ya no está en el segundo lugar del ranking planetario. Y es que, asegura, una derrota por nocaut marca a un boxeador.
“Quiero empezar de a poco, estoy retornando a los entrenamientos. Debo y quiero defender mi título, pero espero tener una pelea previa, ojalá a ocho rounds. Podría ser en septiembre, pero eso puede variar”, señala el chileno.
El monarca latinoamericano ya ha recibido algunos mensajes de eventuales retadores, desde la AMB le notificaron de un peleador venezolano que está muy entusiasmado en medirse al ‘Aguja’, pero González prefiere tomarse las cosas con tranquilidad.
Y es que, por más que diga que prefiere dar vuelta la página tras su último combate, lo ocurrido en el Arena Monticello sigue dando algunas vueltas por su golpeada cabeza.
“Siento que estoy recuperado, he analizado el antes y el después de la pelea, y hay algo que no me cabe. Sentía miedo en la gente, como que algo faltaba. En el trayecto al ring la gente del boxeo me saludaba asustada y yo, yo no tenía miedo de pelear”, enfatiza el púgil.
“Creo que estoy un poco más adelantado que el resto de la gente del boxeo. Hace mucho que en Chile no se veía una pelea de este tipo y, no sé, sentía miedo en la gente nueva en este deporte”, añadió el peleador de 29 años.
Pese a los golpes, la caída ante Moloney y al miedo que González asegura está presente en la disciplina en nuestro país, él no pierde su norte. Su sueño de ser el primer chileno campeón de la AMB sigue intacto y, paso a paso, espera cumplirlo.
“La pelea a 8 rounds es lo primero. Quiero volver, quiero estar en el Top 3 de nuevo. A lo mejor enfrentar a un retador fuera de Chile, creo que sería mejor. Quedé con la imagen de que acá no estamos preparados para este tipo de combates”, asegura Miguel.
¿Cuánto habrá que esperar para ver en acción de nuevo al ‘Aguja’? El tiempo lo dirá. ¿Levantará González el título mundial? Él lo garantiza pero, también, el tiempo lo definirá.
Por mientras, él entrena, debe bajar unos kilos luego de su mes de vacaciones y aguarda por un retador que, el ‘Aguja’ espera, no sea más que un retador, porque el cinturón de campeón latino Súper Mosca no lo soltará fácilmente.