Un equipo que venía en una pésima racha que declinó en el despido de su entrenador contratado en el mercado de pases, Diego López, es Universidad de Chile, elenco que necesitaba urgentemente una victoria, si no querían hipotecar sus aspiraciones a permanecer en la Primera División del campeonato nacional.
Con una victoria por 2 a 1 ante Palestinoy con Sebastián Miranda como entrenador interino (nuevamente), aliviaron un poco las tensiones en su lucha por salvar la categoría, ya que quedan a 3 puntos de la zona de descenso directo.
Tras el triunfo azul, el exjugador, habló con los medios, donde confesó que ganar significó un desahogo tremendo para el plantel y la dirigencia y que es la senda que piensan seguir para no descender.
Con relación a esto, el exfutbolista confesó: “Hoy día fue un desahogo, sí, porque hace tiempo no ganábamos. Se han dicho muchas cosas, algunas son ciertas, otras no, pero al final los jugadores también sienten esa presión”.
“Para mí también fue un desahogo tremendo porque entiendo en el lugar que estoy y sé la responsabilidad que tengo, pero esto llega hasta hoy día. Tenemos que ir partido a partido, ahora quedan cinco y vamos a seguir luchando para que este club salga de ese lugar”, indicó.
También se refirió a la planeación para el duelo contra los árabes, quienes no pudieron doblegar al alicaído equipo azul. Es por eso, que Miranda destacó: “Estaba tranquilo por la semana de trabajo que habíamos tenido. La verdad es que los jugadores nos habían demostrado que todas las tareas que nosotros propusimos se cumplieron”.
“El primer tiempo jugamos muy bien y no terminamos ganando como a mí me hubiera gustado. También hay un momento, el club está complicado, hay un rival que también nos presionó, así y todo supimos sobreponernos a un segundo tiempo complicado”, agregó.
Por otra parte, puntualizó que está es la forma en la que quiere comandar a La U y que con este tipo de partidos, su equipo puede sacar la tarea adelante. En palabras del propio DT, reveló que “hoy demostramos ante un gran equipo que somos capaces. El primer tiempo se jugó de muy buena manera, una presión post pérdida y alta como planteamos”.
“Estoy agradecido del esfuerzo y el trabajo de los jugadores, táctico, físico y psicológico. Es una demostración para ellos, cuando trabajan y quieren, se puede”, sostuvo.
Así también, ya palpita el próximo desafió para su equipo, que será enfrentar a La UC en Copa Chile y es por esto que argumentó: “Sí creo que un clásico se debe jugar como corresponde, vamos a enfrentar a un rival en alza como Universidad Católica y nosotros somos Universidad de Chile, debemos demostrar en todos lados que somos la U y debemos buscar el resultado, siempre”.
Su futuro en La U
Además, fue franco al momento de hablar de su futuro en el cuadro universitario, donde argumentó: “Si es hasta hoy, será hasta hoy, se verá después, pero estoy muy contento por el trabajo y los jugadores. Mañana conversaremos a ver qué pasa, agradezco las palabras de Cecilia (Pérez) y saben que estoy disponible para lo que decidan”.
“Yo soy un fanático del trabajo y si me tengo que quedar, lo hago feliz, porque será porque el club lo decidió y cree que es lo mejor. Yo me enfoco en mi trabajo, trato de irradiar lo que yo creo y siento como entrenador, desde todos los aspectos, técnico, táctico y físico”, sentenció.
Por último, subrayó: “Yo soy cercano al jugador, así lo vibro, así lo siento y sufro. Para mí, hoy la confianza que me dieron y que yo di, se vio en la cancha”.