Pasan los días y la crisis de Universidad de Chile, tanto deportiva como institucional, no deja de agudizarse. Y ad portas de una posible debacle, el rector de la casa de estudios, Ennio Vivaldi, no quiso sólo ser un agente espectador de la situación y envió una dura carta dirigida a Michael Clark (actual presidente de Azul Azul) pidiendo que se acaben con los “secretismos”.
“Le escribo con profunda preocupación por la situación en que se encuentra el Club de Fútbol Profesional Universidad de Chile, cuya administración a través de Azul Azul S.A. usted encabeza”, inicia dicha carta del médico cirujano.
Una misiva que reprocha la actual posición de la ‘U’ en el Campeonato Nacional, quitándole un porcentaje de responsabilidad al plantel y cuerpo técnico para relacionar el coqueteo con el descenso con la mala administración de la sociedad anónima.
“En nuestra opinión, sería un error atribuir la crisis actual a la reciente seguidilla de resultados deportivos adversos. Más bien, estos sólo han venido a exacerbar la inquietud expresada pública y reiteradamente por distintos protagonistas, entre los que nos incluimos, por la escasa información que Azul Azul S.A. ha proporcionado. Se ha requerido insistentemente que se aclaren dos puntos centrales. Uno; es tomar conocimiento de los nombres de los propietarios del club. El otro; saber los planes y proyectos de la nueva administración. Estos factores, especialmente la falta de transparencia y secretismo en torno a la identidad de los inversores de Tactical Sport, han redundado en un clima de desconfianza que está causando perjuicios ante lo cual nosotros como universidad no podemos permanecer indiferentes”, puntualizó.
En ese sentido, Vivaldi fue enfático en aclarar: “Nuestra universidad se inspira y conduce de acuerdo con valores institucionales establecidos en sus estatutos orgánicos, los cuales impregnaron la creación del Club de Fútbol Profesional y que defenderemos siempre. Consecuentemente, como primera y principal universidad pública del país, tenemos el deber de desarrollar nuestra actividad de forma transparente, proba y con estricto apego a los valores y principios que nos rigen. Así, el Club de Fútbol profesional no debe ni puede estar ajeno a dicho modo de actuar”.
“Es precisamente por lo previamente dicho, que los dos miembros del directorio de Azul Azul S.A. designados por la Universidad de Chile, han trabajado permanentemente en impulsar iniciativas que materialicen dichos propósitos valorativos, las que se han concretado en proyectos tan relevantes como el Consejo Azul y la Academia Azul, que usted bien conoce”, agregó.
El reconocido profesor quiso ir más allá para buscar una solución al mal momento institucional que atraviesa el elenco laico, manifestando que “pensamos que los problemas en la conducción del Club de Fútbol tienen una estrecha relación con la forma en que se distribuye la propiedad accionaria de la sociedad anónima. Consecuentemente, proponemos modificar los estatutos sociales, algo que es totalmente factible, fijando fracciones máximas a los propietarios“.
“La situación actual, extremadamente grave, obliga a la Universidad a asumir un rol activo. Por esta razón reiteramos, por su intermedio, nuestra petición a Azul Azul S.A. en el sentido de dar a conocer la información que la opinión pública y los hinchas reclaman, a saber, la configuración propietaria del fondo de inversión que adquirió la mayor parte de las acciones de la sociedad anónima y los planes y proyectos de la nueva administración”, sentenció la misiva de Ennio Vivaldi.
Cabe consignar que, fiel a su estilo, Michael Clark no se ha referido al respecto por ningún medio.