Una insólita y absurda situación complicó a Chile en su estrepitosa caída con Venezuela por las Eliminatorias: la torpe expulsión de Marcelino Núñez.
Cuando La Roja caía por la mínima, el volante nacional acabó viendo una sorpresiva tarjeta roja tras cometer una falta y posteriormente reclamar al juez, el brasileño Flavio Rodrigues De Souza.
Marcelino solo había sido amonestado, pero con su dedo tocó en tres ocasiones el cuerpo del árbitro para quejarse por el cobro. En una de ellas hasta pareció moverlo.
De Souza no perdonó la actitud de Núñez y lo mandó a las duchas.
Chile, con 10, poco pudo hacer contra el conjunto llanero y terminó recibiendo dos goles más: fue 3-0, baile y goleada de la ‘Vinotinto’.