Ricardo Abumohor, presidente de la ANFP durante el paso de La Roja por el Mundial 1998, relató una sabrosa historia del Chile-Italia y que tuvo como protagonistas a Salas y Baggio.

Marcelo Salas llegaba como la máxima figura de La Roja al Mundial de Francia 1998, listo para pasar de River Plate a la Lazio, y concretó un estreno de ensueño en aquella cita futbolística.

El ‘Matador’ se matriculó con un doblete en el 2-2 de La Roja de Nelson Acosta ante Italia. Un empate que amargó al ‘Equipo de Todos’ por un penal polémico que cobró a favor de la ‘Azzurra’ el fallecido exárbitro Lucien Bouchardeau.

Finalmente, Roberto Baggio no falló desde los 12 pasos a los 86’ y puso la igualdad definitiva en Burdeos.

El entonces presidente de la ANFP era Ricardo Abumohor, quien a 25 años del encuentro relató una sabrosa historia del post partido y que tuvo como protagonistas a Salas y Baggio.

“Cuando terminó el partido con Italia, vi a un señor apoyado en la puerta del camarín de Chile. Era Baggio. Me dijo ‘estoy esperando la camiseta de Salas’. Fui a hablar con Marcelo, para decirle que Roberto esperaba su camiseta. ‘Que se vaya a la mierda, no le entrego nada’, me respondió”, contó en diálogo con TVN y que reproduce La Tercera.

Salas estaba furioso por la ‘injusticia’ que provocó el juez sobre el final y por la imposibilidad de sumar los tres puntos ante una potencia del fútbol mundial.

Consultado por el momento, el ‘Matador’ dijo que “yo estaba encerrado en el camarín, no quería hablar con nadie, pero después igual salí y dije ‘que pasó’ y ahí reaccioné. Estaba partiendo, aún no debutaba en la Serie A”.

“Después del Mundial me iba a Italia, así que ahora tengo la camiseta de Baggio, que es un orgullo, por ser un jugador tan importante y con la historia que tuvo”, complementó.

Baggio venía de ser subcampeón del mundo en Estados Unidos 1994, con el recordado penal que elevó en la definición con Brasil en la final, y brillaba en el concierto planetario. En 1998 era compañero de Iván Zamorano en el Inter.