Una jornada gloriosa que cumple ocho años. Un 18 de junio de 2014 el Estadio Maracaná pareció ser por 90 minutos el Estadio Nacional y allí La Roja escribió una de sus más grandes historias con un triunfazo por 2-0 sobre España.

Aparte de esas dos Copa América que hicieron vibrar a toda una nación, el 2015 en el país y el 2016 en Estados Unidos, en la memoria colectiva aparece esa bella tarde en Río de Janeiro con una victoria que instaló al seleccionado chileno en los octavos de final del Mundial de Brasil.

En la antesala todos daban como favorito al combinado encabezado por Vicente del Bosque, que a la tierra de la samba llegaba como el vigente campeón del mundo. Tras un duro traspié en el estreno con Países Bajos, la ‘Furia Roja’ estaba en la obligación de vencer a Chile para mantener las opciones de acceder a la fase final.

Sin embargo, la escuadra dirigida en ese entonces por Jorge Sampaoli comenzó a ganar el encuentro antes del pitazo inicial. A la hora de entonar los himnos, la afición nacional hizo retumbar el legendario recinto desde el ‘Puro Chile’….emoción a full.

La Roja jugó un muy buen partido ante un rival de quilates, con figuras de la talla de Iker Casillas, Sergio Ramos, Andrés Iniesta y Diego Costa. El ‘Equipo de Todos’, que llegaba a este duelo tras superar por 3-1 a Australia en el debut, no se amilanó y salió a jugar de igual a igual.

El Maracaná explotó a los 20 minutos con el 1-0 para Chile. Una gran jugada hilvanada, iniciada por Vidal y Alexis y seguida por Aránguiz, la terminó en el área Eduardo Vargas, definiendo a sangre fría ante el achique del entonces meta del Real Madrid.

Al filo del descanso arribaría la segunda estocada nacional (43′). Luego de un lanzamiento libre del ‘Niño Maravilla’, que despejó de puños Casillas, el balón le quedó en plena área al ‘Príncipe’, que con un perfecto derechazo a borde externo mandó la esférica al fondo de la red.

España se fue en la etapa complementaria con todo en busca de mejor suerte, pero se encontraría con un Claudio Bravo a gran nivel. El capitán de La Roja presentó al menos cuatro notables intervenciones para ahogar el grito de gol del monarca en Sudáfrica 2010.

Pitazo final y la ‘Generación Dorada’ hacía historia. Alcanzaba por segunda vez consecutiva el ticket a octavos en una Copa del Mundo y sentenciaba la temprana eliminación de los campeones del mundo.