“Queremos seguir el trabajo de Marcelo Bielsa y que la gente se siga sintiendo orgullosa y ver a la Roja representada de buena forma”. Con esa frase iniciaba Claudio Daniel Borghi su etapa en la selección chilena, en enero de 2011, tras la polémica salida del rosarino.
Pero el proceso del argentino duraría solo un año y medio. En noviembre de 2012 el entrenador sería despedido del equipo de todos, pero en una fecha como hoy, se escribió el destino del ‘Bichi’.
A dos meses de su salida de la selección, la Conmebol castigaría con 5 partidos de suspensión (luego se reducirían a 4) al extécnico de Colo Colo por insultos racistas. Aunque las fechas de castigo nunca las cumpliría completamente, tras salir de ‘La Roja’ al caer en un amistoso con Serbia.
Ese castigo sería fundamental en la salida del entrenador trasandino, o al menos así lo vio el campeón con Argentinos Juniors hace unos años en Fox Sports Radio, en declaraciones recogidas por As: “No es lo mismo dirigir con un intercomunicador que en la banca. Yo creo que ese castigo fue el 80% de mi salida de la Selección”.
Sin embargo, pudo terminar de distinta forma, más aún cuando esos insultos, como se revelaría con el correr de los años, nunca fueron del DT.
Crónica de un despido anunciado
El proceso de Claudio Borghi tuvo dos etapas, donde la sanción de la Conmebol marcaría un antes y un después en su estadía en la banca de Chile.
Transcurridas 6 fechas de las eliminatorias, la selección se ubicaba puntera con 12 puntos, tras vencer a Perú, Paraguay, Bolivia y Venezuela. Si bien el juego de Chile había cambiado de cuando estaba Bielsa, el equipo se había podido reponer a dos duras goleadas en el inicio de las clasificatorias y especialmente al ‘bautizazo’, donde fueron castigados 5 seleccionados, entre ellos Jorge Valdivia y Arturo Vidal.
Pero justamente en el duelo ante la ‘vinotinto’ en Puerto La Cruz, significaría el principio del fin. Y es que en los últimos minutos el árbitro del encuentro, el colombiano José Buitrago, expulsó a Borghi, en un confuso incidente que terminó con el DT nacional encarando a uno de los comisarios del partido: “¿Usted es FIFA, no? ¿Usted es FIFA? ¿Vio
que no le hice nada? ¡Ya, anótelo!, se alcanzó a percibir en la transmisión televisiva.
Semanas después, se confirmaría la sanción: 5 partidos oficiales por insultos racistas al cuarto árbitro, aunque luego se rebajaría uno tras la apelación de la ANFP. El problema fue que el estratega nunca fue el dueño de esos insultos.
El portero Miguel Pinto, exUniversidad de Chile y hoy en el arco de O’Higgins, confesó años después la verdad sobre lo ocurrido, en una entrevista con el Mercurio:
“Fui yo… No tengo ningún problema en decirlo (…) Cometí alguna equivocación, y en este caso la asumió Claudio (Borghi), a quien le tocó un castigo bastante feo. Pero si en esos días él esperaba que yo reaccionara de alguna u otra forma hacia la prensa o a los más cercanos, le pido disculpas si no lo hice”.
El campeón del mundo con Argentina el 86’ aceptó el castigo y no dirigió los siguientes partidos con Chile en eliminatorias. A pesar de que el entrenador fue claro en que él no le había dicho improperios al árbitro, nunca reveló quién fue, algo que valoró Pinto en la misma entrevista:
“En ese mismo momento, Claudio fue bastante derecho con los jugadores. Asumió el castigo, nunca echó al agua a nadie. Internamente todos sabíamos lo que había pasado. Dentro de la selección hay muchas cosas que no se van a saber. Y en ese caso él se la bancó por mí y se lo agradezco”.
Pero a pesar de las buenas palabras, nada le ayudarían al ‘Bichi’. Después del triunfo en Venezuela y la sanción, nunca volvería a sentarse en la banca en un partido oficial.
Derrota con Colombia por 1-3, con Ecuador por el mismo marcador y con Argentina por 2- 1 en Santiago fueron los últimos partidos en que ‘dirigió’ el actual comentarista en la selección chilena. Esto sumado a dos amistosos, una goleada en contra con la misma selección ecuatoriana y el último, ante el cuadro serbio, donde Chile cayó por 3-1. En el post de ese partido, el expresidente de la ANFP, Sergio Jadue, le pediría la renuncia a Borghi en el camarín rojo.
“Hace unos minutos me junté con el directorio y me pidieron que dé un paso al costado. Tras haber perdido y jugado muy mal, dejo de ser el entrenador de la Selección. Estoy muy triste, se acaba la mejor época de mi vida”, fueron las palabras del argentino en ese momento.
Al ser despedido, Claudio dejó la selección en el sexto lugar de las clasificatorias con 12 unidades, eliminatorias en las que finalmente Chile terminaría cuarto de la mano de Jorge Sampaoli, y clasificando a Brasil 2014.
Las 3 derrotas consecutivas por eliminatorias, coincidieron cuando el entrenador tetracampeón con Colo Colo estuvo suspendido. Y para el extécnico fueron determinantes a la hora de rescindir su contrato. Así lo recordó este año en el programa Todos Somos Técnicos de CDF, espacio donde es panelista: (El castigo) afectó muchísimo, el técnico no siempre te salva, pero está ahí. (Yo) No podía dar la charla, no podía hacer los cambios, no
podía hacer absolutamente nada”.
